El desencadenante de la Primera Guerra Mundial (1914-1918) se sitúa a partir del asesinato del archiduque Francisco Fernando, heredero de la corona austrohúngara. Pero este hecho no es algo aislado, ya que se enmarca dentro de un contexto de mucha tensión entre los diferentes estados europeos a raíz de las posesiones coloniales y los crecientes conflictos en la zona de los Balcanes.

El Tratado de Paz de Versalles (1919) supuso el fin de la Guerra entre Alemania y los Aliados. Las disposiciones establecidas intentarían regular aspectos muy complejos que requerirían mucho tiempo de negociación. Por este motivo, la entrada en vigor de los acuerdos no sería hasta el 10 de enero de 1920. La destrucción de los Imperios, la aparición de nuevos países y la imposición de sanciones económicas y territoriales al perdedor serían los aspectos más controvertidos del tratado, que acabarían reestructurando un nuevo mapa europeo.

Durante la Guerra, la comunicación tuvo un papel fundamental. Entre los diferentes medios utilizados, el correo postal tuvo también su papel. La comunicación de los soldados con sus familias dependía exclusivamente del servicio de correos. Un soldado podía estar hasta un mes atrincherado en primera línea, esperando el momento del combate.

Por todo ello, desde este año hasta 2018, las autoridades postales de diferentes países emitirán sellos conmemorativos recordando estos hechos. La Royal Mail de Reino Unido ya ha anunciado la emisión de una serie histórica que constará de un total de 30 sellos (emitirán seis cada año). Los primeros se venderán a partir de julio de este año.

Entre las exposiciones destacadas, recomendamos “Last Post: Remembering the First World War”. La exposición está organizada por el British Postal Museum & Archive y se irá presentando en diferentes museos ingleses entre el 5 de abril y el 13 de diciembre de 2014.

21 de marzo de 2014