Un día fatídico que desgraciadamente entrará a formar parte de la historia de Nepal. Los muertos y desaparecidos se contabilizan por miles, provocando una de las tragedias humanitarias más horribles que se recuerdan. Miles de nepalíes han visto cómo perdían la vida sus seres queridos y cómo sus hogares se convertían en montañas de escombros. La magnitud de la tragedia ha abierto una herida que tardará mucho tiempo en cicatrizar. Resulta esencial que más allá de las ayudas puntuales que se puedan llevar a cabo, la comunidad internacional establezca un compromiso estable y duradero que asegure la recuperación del país en un periodo razonable de tiempo.

Además de las inestimables pérdidas humanas, también se ha visto gravemente afectado el patrimonio histórico, artístico y cultural del país. El valle de Katmandú, una de las cunas de la humanidad donde diferentes culturas, lenguas y religiones se han relacionado e incluso fusionado, configura uno de los emplazamientos con un patrimonio inmaterial y material más complejos y valiosos del planeta.

Desde aquí queremos sumarnos a las iniciativas emprendidas desde nuestra ciudad, y os animamos a colaborar con las acciones de ayuda promovidas por la Asociación de Amigos de Nepal, una ONG que hace veinte años que organiza proyectos de apadrinamiento, cooperación y solidaridad con el país.

Desde la consternación y la humildad, el Gabinete Postal de Barcelona quiere añadirse a los miles de mensajes de solidaridad dirigidos al pueblo de Nepal. Queremos expresarlo de una manera simbólica mostrando los ejemplares de sellos de Nepal dispuestos en la Colección Marull emitidos durante el periodo de gobierno de la dinastía Rana entre 1881 y 1907.