You are here

Finaliza una de las últimas fases de mejora urbana en el Bon Pastor

Una urbanización que se refuerza con nuevas promociones de vivienda protegida

Las obras de transformación (fase F) que empezaron en junio de 2021 y que habían de mejorar el ámbito comprendido entre las calles de Tallada, Biosca, Sant Adrià y el paseo de Mollerussa, ya han finalizado. Las mejoras implementadas han seguido la filosofía de urbanización hecha hasta la fecha en el ámbito de las antiguas ‘Cases barates del Bon Pastor’, creando macromanzanas de nuevas viviendas, generando más verde o mejorando la conectividad y la accesibilidad en todo el barrio. En conjunto, abarcando un espacio renovado de 17.712m2, cuyas mejoras constituyen la recta final de la remodelación de este barrio histórico de Sant Andreu.

Cuenta atrás para la finalización de la Remodelación urbana del ámbito de las antiguas ‘Cases del Bon Pastor’, en el noreste del distrito de Sant Andreu.

Las obras de mejora de esta gran cuadrícula urbana que engloba las calles de Sas-Passeig de Mollerussa-Arbeca-Sant Adrià, y que empezaron en 2005, generando nuevas viviendas, mejor conectividad, verde, entre otras mejoras, y que representó el inicio de una importantísima transformación urbana en este distrito de la ciudad, ya están perfilando la que será la imagen del siglo XXI de este barrio histórico.

En concreto, el objeto de estas obras de la llamada Fase F que han finalizado este pasado mes de noviembre y que empezaron el mes de junio de 2021, ha sido continuar mejorando los nuevos espacios urbanos creados en todo este proceso de transformación de este barrio ‘histórico’ -nacido a finales de los años veinte del siglo pasado- y en paralelo dotar de servicios los nuevos edificios.

Así pues, se ha continuado con la filosofía de urbanización hecha hasta ahora (en las fases anteriores), donde se generan macromanzanas. Un espacio, éste, renovado, que queda incluido dentro del perímetro que conforman las calles de Mollerussa (en el Norte), Biosca (Oeste), Sant Adrià (Sur) y Tallada (Este).

En esta mejora se incluyen nuevos trazados de viales y diferentes servicios, sistemas de drenaje sostenible mediante parterres drenantes y una RPRSU (red de recogida neumática), mientras que se deja para más adelante, una segunda fase, que incluirá la eliminación del desnivel existente entre el barrio y la cota superior de la losa de la Ronda Litoral, que hace de límite y de barrera con el río Besòs.

Por este último motivo, pues, se propone modificar la topografía actual, subiendo la rasante de una parte de este sector, concretamente del ámbito de las calles de St. Adrià y de Arbeca, que son los más afectados.

Un ajuste, que ya viene determinado en el PMU (Plan de Mejora Urbana) y que determina que el barrio levante suavemente sus rasantes desde la calle de Sant Adrià hasta llegar a la cota de cobertura de esta vía de tráfico que circunvala Barcelona, allá donde precisamente encontramos el puente de peatones que conecta los dos cauces del río, permitiendo acceder a la ciudad de Santa Coloma de Gramenet.

De este modo, pues, se obtiene una superficie continua vinculando al barrio los equipamientos deportivos que se encuentran por encima de la losa.

Y es que, actualmente, estos últimos se sitúan más de un metro y  medio por encima, configurando una barrera arquitectónica que requiere escaleras para llegar.

En cuanto a la distribución de la nueva movilidad, se han creado dos jerarquías de viales: el de tráfico perimetral de este sector, que generará orden; y el de prioridad invertida, que permiten la circulación interior para vecinos y vecinas. Además del que se genere a través de la calle Novelles, eje vertebrador en el interior de la gran manzana.

También encontramos dos tipos de aceras: las que dan continuidad en la urbanización ya existente; y una segunda, correspondiendo a los interiores de manzana, que incluye pavimento de hormigón pulcro tipo ‘terrazo’, como ya se hizo en la fase anterior, haciéndolo antideslizante.

En conjunto, todo este nuevo espacio será más accesible, donde de Norte a Sur, por ejemplo, hay itinerarios adaptados en todos los viales; y dónde de Este a Oeste, los recorridos tienen menos de un 6% de pendiente.

Una continuidad, pues, a la configuración del concepto de macromanzanas en esta ‘isla urbana’, con una ‘plaza central’, nuevos espacios con juegos infantiles, juegos de mesa, área de picnic…; con nuevo ajardinamiento, luminarias LED, y mobiliario urbano (sillas, bancos, papeleras, pilones, aparcamiento para bicicletas, y fuentes).

Esta fase de remodelación urbana en el Bon Pastor se ha ejecutado a través del Institut Municipal d’Urbanisme (IMU) y ha contado con una inversión de unos 6 M€ (IVA excluido).