Participación e informalidad en el tejido asociativo de Barcelona

07/01/2021 - 14:14 h

Recursos. El estudio Participación e informalidad en el tejido asociativo de Barcelona analiza cómo es la participación ciudadana más allá de las entidades formales de la ciudad

La Dirección del Servicio de Acción Comunitaria publica un estudio sobre la participación ciudadana en la vida de la ciudad, poniendo el énfasis en las formas de participación que no necesariamente transcurren a través del asociacionismo formal.

El estudio analiza, por un lado, la evolución del asociacionismo formal y, por el otro, detecta y mide cuál es la magnitud y cuáles son las características de las formas organizativas no formales, especialmente las destinadas a satisfacer necesidades y las que son reivindicativas.

Estas dos aproximaciones permiten comparar los dos movimientos y reflexionar sobre qué rol puede tener la política pública con respecto a las iniciativas informales.

Innovación social de las iniciativas informales

Según el informe, existe un número importante de iniciativas informales de carácter reivindicativo que buscan satisfacer necesidades y que, por lo tanto, son significativas para la acción comunitaria, pero quedan poco registradas por las herramientas que estudian el asociacionismo formal.

En Cataluña son mayoritariamente de carácter microcomunitario, ya que el 50 % de las experiencias no superan las 50 personas y están formadas por pequeños grupos sociales que buscan satisfacer necesidades compartidas y establecer vínculos comunitarios.

Interacción entre iniciativas ciudadanas y la Administración pública

Dado que son las clases medias con un nivel socioeducativo suficiente las que disponen de los recursos para organizarse e impulsar iniciativas, mientras que en los barrios con menos recursos falta un tejido social estructurado, el informe señala que hace falta la colaboración de las administraciones.

El informe concluye, sin embargo: “La Administración pública se tiene que asegurar de que las subvenciones o la invitación a formar parte de órganos consultivos no genere dinámicas de expulsión de los participantes de un nivel socioeducativo más bajo, ni suponga un riesgo para la participación horizontal de las organizaciones”.