La educación intercultural en diálogo | ¿Qué piensan los jóvenes?

¿Qué elementos favorecen la educación intercultural? ¿Cuáles la impiden o dificultan? ¿Cómo influyen los prejuicios y estereotipos en la educación del alumnado?
 
El 21 de noviembre de 2018 tuvo lugar en el Espai Avinyó una mesa redonda formada por jóvenes de diferentes contextos culturales vinculados académicamente o profesionalmente al ámbito educativo, con el objetivo de reflexionar sobre la educación intercultural y su incorporación en los centros educativos.
 
La mesa contó con Fatima Belghirane (maestra de educación infantil), Isaac Heredia (promotor escolar a San Andreu), Ayoub Mouka (máster en Investigación en la educación y profesor de secundaria) y Cristina Zhang Yu (psicóloga de la educación). Como conductora, Jessica González (coordinadora del área de Interculturalidad del Centro de Estudios Africanos e Interculturales). Lola López, Comisionada de Inmigración, Interculturalidad y Diversidad del Ayuntamiento de Barcelona, abrió el acto remarcando la importancia de tener en cuenta los principios de la perspectiva intercultural en el día a día de los centros educativos, en el currículum escolar, en la atención al alumnado y las familias y la relación con el entorno y la comunidad.
 
Destacamos del diálogo:
 
  • Jessica González dio comienzo a la mesa redonda reflexionando sobre cómo en Occidente, a menudo, se sigue hablando de los “otros”. ¿Quiénes son los otros? Pueblos o civilizaciones enteras, los saberes de las cuales se han silenciado y escondido, tanto en la sociedad en general como en las aulas. Hace falta que los currículums escolares y las metodologías incorporen saberes, lenguas, conocimientos, espiritualidades, etc. de todas las comunidades que forman parte de Barcelona.
  • Isaac Heredia profundizó en el currículum escolar. Habló de la necesidad de incorporar metodologías pedagógicas otros lugares del mundo algunas de las cuales, además, se han demostrado muy eficaces como la enseñanza de las matemáticas que se hace en los países orientales, o la manera de aprender música que tiene la cultura gitana. El hecho de incorporar otras metodologías y contenidos tiene mucha importancia, en primer lugar por el reconocimiento cultural que supone para los alumnos con otros referentes culturales. En una sociedad donde la diversidad lingüística y religiosa es tan grande, no dar la oportunidad de aprender en la escuela lenguas como el chino, el árabe o lo romanó, así como invisibilizar la historia del pueblo gitano o las festividades religiosas de diferentes comunidades, implica asumir la carencia de importancia de estas lenguas y manifestaciones culturales e históricas.
  • Fatima Belghirane reflexionó sobre los elementos que hay que tener en cuenta cuando hablamos de relación de la escuela con el entorno, como por ejemplo el idioma. Muchas escuelas no saben que existe un servicio de intérpretes de la Generalitat que ayuda a entenderse con aquellas familias que todavía no dominan el catalán y el castellano. También hay que preguntarse cómo llegar a las diferentes familias y hacer que participen en la escuela. Elementos tan sencillos como traducir las notas que se ponen a las familias o invitarlas a conocer la escuela y explicarlos el funcionamiento de la misma, pueden ser de gran ayuda. Uno de los grandes problemas de la relación entre escuela y familias es que no hay bastante comunicación y que esta se tendría que favorecer por diferentes vías, afirmó la ponente.
  • Ayoub Mouka añadió que, en muchas ocasiones, los padres y madres de otros orígenes no participan, por ejemplo, en las AMPES porque tienen miedo de que su voz no sea escuchada, que no se les tenga en cuenta. Nos habló del éxito educativo, haciendo hincapié en las mayores tasas de fracaso escolar entre los alumnos migrados. Este hecho se explica por varios factores: el nivel socioeconómico, muchos alumnos migrados o hijos de familias migradas se encuentran en un estrato socioeconómico bajo; la segregación escolar, se acaban construyendo centros escolares con mejores condiciones de aprendizaje con un porcentaje elevado de alumnos “autóctonos” y centros escolares con peores condiciones de aprendizaje con un porcentaje elevado de alumnos “migrados”, también hay segregación escolar dentro de los centros educativos, separando los alumnos por niveles; y finalmente,  Ayoub destacó el papel del profesorado y como este acostumbra a tener unas expectativas más bajas sobre los alumnos migrados, lo que favorece el Efecto Pigmalión (que los alumnos se acaben creyendo el que los profesores piensan de ellos).
  • Cristina Zhang, profundizó en este aspecto partiendo del punto de vista de que la identidad no se construye individualmente, sino en constante relación con el entorno, tiene una dimensión social muy importante. En cada situación social, somos diferentes, nos comportamos de manera diferente. “Yo no soy la misma cuando como con mis padres a casa que cuando salgo con mis amigas”- afirmó Cristina. Lo que pasa generalmente con la escuela es que aquellas manifestaciones identitarias que son mejor aceptadas y reconocidas son las que están más en consonancia con la identidad de la escuela. El resto de manifestaciones identitarias se pueden expresar, pero tenderán a ser incomprendidas e invisibilizadas.