Noreen Akhterkhan: “Es muy importante que nuestros hijos aprendan urdu para que no pierdan sus orígenes”

 

Noreen Akhterkhan Begum, nacida en Pakistán, madre de cuatro hijos, llegó a Barcelona hace 22 años, y hace 10, que vive en Nou Barris, antes vivió en Hospitalet durante 11 años. Es miembro del Consell escolar de la Escuela el Turó. Será una de las participantes en la actividad organizada por el Espai Avinyó el próximo 23 de febrero, enmarcada en el Día Internacional de las lenguas maternas.

Naila Jabeen Hussain Bibi, nacida en Pakistán. Actualmente, vive en Barcelona, donde acaba de terminar el bachillerato y está estudiando un ciclo de informática.

Noreen y Naila son dos personas muy activas en el barrio del Turó de la Peira. Con ellas nos juntamos en el Casal de barri La Cosa Nostra para hablar sobre su trayectoria en el barrio y las iniciativas surgidas desde la propia comunidad pakistaní.

El próximo 23 de febrero, Noreen participarás en la actividad organizada por el Espai Avinyó ‘21F | اردو: Plurilingüismo en el contexto escolar, enmarcada en el Día Internacional de las lenguas maternas. Una mesa redonda en la que se propone hacer un pequeño zoom en el urdu. En la escuela Turó hay clases extraescolares de árabe y urdu para los niños. ¿De dónde surgió hacer las clases de urdu? ¿Conocíais otras iniciativas?

Noreen: cuando llegué al Turó de la Peira, mi hijo empezó a estudiar en el Colegio Turó y a partir de aquí empecé a tener amistad con muchas personas de la comunidad pakistaní. Hablando con otras madres, todas coincidimos en que a nuestros hijos les costaba mucho hablar urdu con sus abuelos en Pakistán o con los otros niños, porque solamente hablaban catalán y castellano. Sentíamos tristeza al pensar que podían perder su lengua materna. Es por este motivo que luchamos para obtener el permiso para organizar clases de urdu para nuestros hijos. Desde el 2020 que hacemos las clases y, actualmente, hay unos 20 niños, muy felices de poder aprender su lengua materna.

¿Creéis importante que vuestros hijos/ familiares puedan hablar y escribir en urdu? ¿Por qué?

Naila: necesitábamos hacer clases porque los niños pakistanís que estudian en colegios de Barcelona aprenden español y catalán solamente, y les cuesta hablar urdu, y para nosotras es muy importante que conozcan su cultura y que no pierdan la lengua de su origen. En mi caso, mi familia es muy grande, entonces si hablamos entre nosotros, los niños ya aprenden la lengua.

Noreen: yo, en cambio, no tengo mucha familia en Barcelona, y aunque hable con mis hijos en urdu, ellos quieren hablar español conmigo. Están acostumbrados a hablar español y catalán en la escuela, por lo tanto, es más difícil que mis hijos aprendan urdu. Por esto está bien que vayan a clases de urdu, porque les gusta aprender con la profesora. Pasa en muchas casas que los niños entienden castellano y catalán y nada de urdu. Por esto es tan necesario este proyecto, para que los niños puedan leer y escribir la lengua, y que cuando viajen a Pakistán puedan comunicarse con sus familiares. Mis hijos no lo entienden todo todavía, pero poco a poco, y gracias a estas clases, van mejorando.

Naila: empezar una nueva lengua cuesta. Pero tienen ganas, porque siempre que viajan a Pakistán les cuesta mucho entender la cultura. Tengo una hermana pequeña que, aunque ella sabe urdu y todas las lenguas que hablamos, cuando viaja al Pakistán, hay términos de la cultura que le cuesta entender, es por esto que, en las clases, aparte de la lengua, también se enseña la cultura.

¿Conocéis otras escuelas o institutos de Nou Barris que desarrollen este proyecto?

Noreen: no, este proyecto es pionero en el barrio, y ahora la idea es poder conseguir que se lleve a cabo en el instituto Trinitat Nova también. Tengo un hijo que va a tercero de la ESO y le cuesta mucho hablar y entender urdu, por esto es necesario que se enseñe en el instituto.

¿Solamente hablando urdu en casa no se puede aprender?

Naila: no se puede conocer del todo. A través de las clases es donde aprenden mejor la lengua, tanto escrita como oral.

Vuestra lengua materna es el urdu, pero también conocéis el castellano y el catalán, ¿alguna más?

Noreen: la mayoría de las personas pakistanís que viven en el barrio hablan el panyabí, la lengua que se habla en la región del Punyab (entre India y Pakistán). Hay muchas otras lenguas en el Pakistán, el Sindhi, cachemir, guyaratí… y el urdu que se habla en todo el Pakistán.

Naila: y en la ciudad los niños desde P3 aprenden el inglés.

¿En el proyecto de lenguas se enseñan otras lenguas del Pakistán?

Noreen: de momento urdu, porque en general en Pakistán se habla esta lengua.

¿Cómo ha influido en vuestras vidas el poder hablar y entender las distintas lenguas? 

Naila: poder relacionarnos con nuestras familias en Pakistán, y también con nuestras amigas. También para poder relacionarnos con otras personas del AFA, de la escuela, del barrio... para poder desarrollar los proyectos.

Noreen justamente estás dentro del AFA de la escuela del Turó. ¿Crees que ha ayudado estar dentro para poder conseguir estos proyectos?

Noreen: sí, también participamos de muchos de los eventos y fiestas que se organizan desde la escuela. Familias de origen marroquí, pakistaníes del barrio participamos en la organización de fiestas en el barrio, ya que existe mucha conexión entre familias.

Naila: esta buena conexión existe porque Noreen consigue movilizar a muchas personas. Si algún día Noreen falta en la clase de costura, o de deporte, muchas compañeras no vienen.

Para las madres de alumnos de la escuela también ha habido sesiones en urdu de diferentes temas (educativos, nutrición…). ¿Cómo valoráis esos encuentros? ¿Creéis importante que existan espacios así?

Noreen: participaron muchas madres y salieron muy contentas. Y ahora, gracias a este proyecto, bajaron de peso tanto los niños como las madres. (Ríe).

¿Hay charlas o talleres que puede hacer la escuela, pero el hecho de que estén en catalán o castellano es una barrera para otras madres?

Noreen: sí, muchas madres pakistaníes no entienden ni el catalán ni el castellano. Como llevo 11 años en el barrio, y entiendo tanto el catalán como el castellano, las acompaño a muchos espacios para hacer de traductora.

¿Sabéis si estas iniciativas se desarrollan en otros barrios de Barcelona?

Noreen: creo que sólo se lleva a cabo en este barrio, no me ha llegado que este tipo de proyectos se desarrollen en otros barrios. Sé que en Trinitat Nova empezaron a hacer clases de urdu, pero se inspiraron en nuestro proyecto. Es importante que esta iniciativa se pueda desarrollar en otros barrios, no sólo en el Turó de la Peira, sino que otras comunidades pakistaníes de la ciudad se muevan para crear este tipo de proyectos.

¿Cómo valoráis los espacios de encuentro y relación entre familias que suceden en la escuela? 

Noreen: muy bien, aquí vienen muchas mujeres pakistanís que se sienten muy felices mientras aprenden nuevas herramientas para su día a día.  

Otra de las iniciativas surgidas desde la propia comunidad es el criquet masculino y femenino, que cada vez está más presente en el barrio y en la ciudad. ¿Cómo han surgido los proyectos y qué apoyos necesitan?  

Naila: en comparación con el criquet femenino, el criquet masculino ha crecido bastante, y se han hecho muchas partidas. Nosotras hemos jugado una partida en el Turó, donde vinieron más equipos de otros barrios: del Besós, la Trinitat y Sant Martí.

Noreen: a pesar de que por ahora sólo somos 5 mujeres jugando a criquet, no queremos parar. Poco a poco vamos a conseguir que nos vean y salgan más partidos. Normalmente, jugamos en la escuela Calderón del barrio.

¿Cómo es el espacio?

Naila: el espacio está bien, pedimos un campo cerrado para hacer criquet y nos lo proporcionaron. Los más pequeños juegan en la escuela Calderón y las personas adultas en un campo exterior aquí en el Turó.

¿Personas que no son de familia o de origen de Pakistán se han interesado por el criquet?

Naila: sí, al principio, elaboramos y colgamos pósteres también para que el vecindario lo supiera. Los niños están muy interesados en jugar a criquet, miran las partidas por la televisión incluso.

Pensando en presente y futuro. ¿Qué es lo que más valoráis del barrio (o ciudad)? ¿Y qué os gustaría mejorar (para ti, para tu familia, tus vecinas…)?

Naila: llegué al barrio hace 7 años, aunque empecé a participar en las actividades el año pasado, pero creo que se ha mejorado bastante comparado con los otros barrios, porque hay más proyectos, hay más actividades.

Noreen: lo que más valoro es todo lo que hemos hecho para que las personas del barrio puedan disfrutar de las actividades: urdu, el taller de costura para las mujeres... creo que las personas que participan de estas actividades están muy contentas, y vamos a trabajar para conseguir más proyectos.

¿En el barrio también celebráis las festividades musulmanas en comunidad

Naila: sí, festejamos Eid al-Fitr, la celebración del fin del Ramadán, en el que todas las personas musulmanas nos juntamos a compartir platos típicos, tanto dulces como salados, en las mezquitas.

Noreen: normalmente, los hombres lo celebran en la mezquita, pero como ha crecido tanto la comunidad pakistaní en el barrio, actualmente se celebra en el campo.

Naila: la otra celebración es la fiesta del cordero, que dura tres días, cortan el cordero y la carne la comparten entre familias, vecinos y las reparten entre los pobres.

¿Cuáles son vuestros espacios preferidos del barrio o a los que asistís más habitualmente?

Noreen: me gusta mucho frecuentar el Casal la Cosa Nostra, donde hago las actividades, la escuela del Turó, el AMPA. En todos lados me quieren mucho, es difícil escoger uno.

Naila: yo he estado muy ocupada con mis estudios, entonces he empezado a participar en las actividades de criquet, de costura... el año pasado.  

Noreen: el año pasado organizamos La Culturalíssima, un nombre surgido de los niños de la escuela, en la que las personas traían comida de sus países de origen. Tuvo mucho éxito, vino mucha gente. Nosotras llevamos comida pakistaní típica y Naila estaba dibujando henna.

Naila: otras chicas y yo estuvimos cinco horas poniendo henna a todas las mujeres, niños... que querían. ¡Había una cola larguísima!

Noreen: el próximo 29 de abril, volvemos a organizar una nueva edición. Va a ser mejor porque será un sábado. Todas nuestras iniciativas salen de las personas que se mueven y se organizan para que todo esto salga bien. No nos hace falta montar una asociación porque ya lo hacemos nosotras mismas: entre las madres, comunidad paquistaní...

Viendo el éxito que tenéis a la hora de organizar talleres, actividades, fiestas... y la repercusión que tiene en el barrio, ¿qué recomendaríais a las personas que quieren ser proactivas a la hora de organizarse?

Naila: creemos que mirándonos a nosotras les entran las ganas de organizar y proponer. (ríe).

Noreen: nos hemos movido y hemos luchado mucho para conseguir todo esto, así que el consejo sería que lucharan para conseguir lo que quieren. 

¿Creéis que sería necesario que en el currículo escolar se aprendieran otras lenguas que no fueran solo el inglés, francés, alemán...?

Noreen: sí, porque esto permitiría que las personas que viven fuera de sus países de origen puedan comunicarse con sus familiares que viven lejos.

¿Tenéis referentes de otros jóvenes de origen pakistaní que estén en la universidad o en otros estudios?

Naila: en mi clase del ciclo soy la única chica de origen pakistaní. En el instituto sí que hay. Tengo amigas que han estudiado conmigo, que han ido a la universidad.

 

Naila (esquerra) i Noreen (dreta) al Casal de barri La Cosa Nostra