Generación y prevención de residuos en Barcelona

En lugar de llamarnos sociedad de consumo, podríamos llamarnos sociedad de los residuos. Todas las cosas que tiramos una vez utilizadas y todas las materias que resultan de un proceso industrial y no tienen utilidad se pueden considerar residuos.

La producción de residuos en Catalunya el año 2016 se sitúa alrededor de 3.700 toneladas, que equivale a 1,36 Kg/habitante/día. Barcelona está alrededor de los 1,29 kg/habitante y día.

En Cataluña se ponen en venta 9 millones de envases de bebidas cada día y los países europeos han aumentado el volumen de residuos por cápita en más de un 60% en los últimos años, muchos de los cuales son de un solo uso.

Los recursos naturales son limitados y, si toda la población mundial consumiera de la misma manera que lo hacemos nosotros, harían falta 3 planetas como la Tierra para cubrir la demanda.

Los residuos representan uno de los problemas ambientales más importantes ya que contaminan, provocan pérdida de biodiversidad, aceleran el cambio climático y su gestión comporta un consumo elevado de recursos y genera un gran gasto económico.

Ante esta situación, ¿qué podemos hacer? Para reducir la gran cantidad de residuos podemos seguir la regla de las 4R, que se basa en los principios de Repensar, Reducir, Reutilizar y Reciclar.

Repensar, pararse a pensar si el producto que queremos comprar realmente lo necesitamos ya que el mejor residuo es aquél que no se produce.

Reducir la cantidad de desperdicios que generamos, evitando los residuos innecesarios mediante hábitos de consumo más sostenibles como llevar el capazo a la hora de ir a comprar, optar por productos a granel o poco envasados, etc.

Reutilizar los productos una vez han cumplido su función principal, es decir darles otro uso (como puede ser utilizar el tarro de vidrio de legumbres cocidas para guardar arroz), devolverlos (como todavía podemos hacer con las botellas de cava que si las llevamos al punto verde las volverán a utilizar para guardar el cava) o repararlos si se han estropeado. Todas estas medidas sirven para alargar la vida de los objetos y reducir el consumo y los residuos.

Reciclar, finalmente si los productos ya no sirven, los separaremos de forma adecuada para su reciclaje. En este proceso los materiales de rechazo son recogidos y transformados en otros materiales que pueden ser utilizados como nuevos productos o como materias primas. Así conseguimos no sólo evitar el deterioro ambiental, sino también un ahorro de energía y materias primas.

Adoptar sencillas medidas en nuestra vida diaria para reducir la cantidad de residuos que generamos está al alcance de todos los consumidores y consumidoras.

En la web de la Generalitat de Cataluña te puedes informar sobre a qué contenedor van los diferentes residuos que generamos, qué proceso siguen para su tratamiento y en qué se acaban transformando.

En el portal de la Agencia de Residuos de Cataluña también encontrarás información sobre la producción y la reducción de residuos, así como iniciativas destacadas en el ámbito de la prevención.

En el ámbito de las entidades existe Rezero, una organización impulsada por entidades ecologistas y cívicas del país con el apoyo y la participación de sectores diversos de la sociedad civil, las administraciones y el mundo empresarial. Su objetivo es conseguir frenar el consumo irresponsable de recursos y energía derivado del modelo de consumo actual. En su web encontrarás estudios de investigación, asesoramiento, campañas divulgativas, materiales educativos, entre otros.

Si te interesa la reparación, en la web del programa Mejor que Nuevo encontrarás apoyo y asesoramiento gratuito para que puedas reparar por ti mismo algunos aparatos y objetos.

Con la guía de reciclaje del Ayuntamiento de Barcelona podrás encontrar ideas para reducir los residuos y clasificarlos correctamente para su reciclaje.