La extensa producción artística del fotógrafo Humberto Rivas ya forma parte del fondo del Arxiu Fotogràfic de Barcelona, que desde ahora se encargará de conservar y difundir su obra y facilitar el estudio. El material, que ya se conservaba provisionalmente en el archivo y ahora pasa a depositarse de forma definitiva, incluye:
- 23.193 negativos, placas y diapositivas de diferentes medidas, así como los contactos
- 6 maquetas de fotomontajes
- 200 tirajes originales realizados por el artista que representan los temas que caracterizan su obra (desde personajes conocidos hasta bodegones y paisajes urbanos)
- Un lote de documentación
La biografía de Humberto Rivas
Humberto Rivas nació en Buenos Aires el año 1937, pero su trayectoria está ligada de manera íntima a Barcelona, la ciudad que lo acogió desde 1976 junto con su compañera, la artista María Helguera (en la imagen, en una fotografía del año 1978), y su familia, un exilio forzado por la dictadura argentina.
Creó un primer estudio de fotografía publicitaria en un momento en el que el país vivía la transición y la escena fotográfica ensayaba la experimentación. En este contexto, las imágenes de Humberto Rivas, de carácter objetivo, se hicieron sitio rápidamente dentro de la escena de la ciudad, y sus retratos fueron muy bien acogidos por los fotógrafos del momento.
Testigo de una época, la obra de Rivas incluye muchos paisajes (algunos de los cuales, como los de la serie Huellas, muestran las huellas de la Guerra Civil Española) en los que nos habla de ausencias y presencias a partir de unos espacios urbanos decadentes y vacíos.
Además, hizo muchos retratos de personalidades ligadas a la política y a la cultura catalanas, sumados a muchas fotografías de personajes anónimos o directamente marginales que nos hablan de otra Barcelona, más allá de la visión más oficial y superficial. Es el caso del retrato que le hizo a Violeta la Burra el año 1978 (en la imagen), una de las instantáneas más conocidas del autor.
Vínculo con Nou Barris
Con una faceta pedagógica notable, Rivas pasó por equipamientos docentes de la ciudad relacionados con la fotografía, como el Centre Cívic Can Basté. Por ello, la plaza situada detrás del edificio, entre el mercado y la iglesia, lleva desde enero de 2020 el nombre del fotógrafo.
Su presencia en Barcelona contribuyó notablemente a la renovación del lenguaje fotográfico, enfocando la realidad con una mirada vanguardista y sin necesidad de limitarse estrictamente al documentalismo.
El artista se hizo con galardones destacados: desde el Premio Nacional de Fotografía el año 1997 hasta el Premio de Artes Plásticas del Ayuntamiento de Barcelona (1997) y la Medalla de Oro al Mérito Artístico, que le fue concedida pocos días antes de que muriera, el año 2009.