Pionera del baloncesto femenino, fue también árbitra y entrenadora en una época donde mujeres y deporte no era una combinación habitual. Llegó a Barcelona con 10 años y empezó a jugar al baloncesto con 13, con los niños y niñas de su barrio. ¿Te imaginas a una joven espigada que sobresale entre los demás? Encarna medía 1,54 metros, pero su altura era inversamente proporcional a su talento como deportista. Conocida por los ganchos que hacía, su jugada estrella le valió el sobrenombre por el que sería conocida. Con el equipo de baloncesto del Laietà ganó el primer campeonato de baloncesto femenino de Cataluña, la temporada 1935-36. Después de pasar por varios clubs y de tener que compaginar el baloncesto con otros trabajos para subsistir, en 1944 fichó por el FC Barcelona, equipo con el que se retiró en 1953, con 36 años. También fue la primera entrenadora de baloncesto en España, y se convirtió en un referente para todas las jugadoras de baloncesto de las siguientes generaciones. El documental La niña del gancho, de Raquel Barrera, estrenado en el 2016, ayudó a difundir la biografía de esta deportista pionera.
Jugadora de baloncesto, árbitra y primera entrenadora de este deporte en España. El documental La niña del gancho, de Raquel Barrera, estrenado en el 2016, ayudó a difundir la biografía de esta deportista pionera.