Las mujeres siguen siendo responsables de la mayoría de tareas del hogar y los cuidados durante el confinamiento

04/06/2020 - 10:30

IGUALDAD. Según un estudio desarrollado por la Universidad de Barcelona y la Universidad Pompeu Fabra las mujeres han seguido siendo las responsables de la mayor parte de las tareas de cuidado y del hogar durante el periodo de confinamiento.

Según un estudio desarrollado por la Universidad de Barcelona y la Universidad Pompeu Fabra las mujeres han seguido siendo las responsables de la mayor parte de las tareas de cuidado y del hogar durante el periodo de confinamiento. Los datos indican también un ligero incremento de la participación de los hombres en el trabajo doméstico, sobre todo en cuanto a la compra.

El estudio ha sido desarrollado por Libertad González, profesora del Departamento de Economía y Empresa de la UPF y de la Barcelona GSE, miembro del Centro de Estudios de Género (CEDG) de la Universidad, y Lidia Farré, profesora del Departamento de ‘Econometría, Estadística y Economía Aplicada la Universidad de Barcelona. «Nosotras sospechábamos que esta crisis, a pesar de tener una naturaleza sanitaria, tendría un impacto económico importante e incrementaría las desigualdad entre grupos sociales. Y uno de estos grupos se refiere a hombres y mujeres. Tradicionalmente existen unas normas sociales que atribuyen el papel de cuidadoras a las mujeres y esta crisis, con el cierre de las escuelas, ha provocado un incremento desmesurado y sin precedentes de las tareas domésticas y cuidados de los niños. Sospechábamos que esto recaería sobre las mujeres », asegura Farré.

El cierre de centros educativos y la reducción de la capacidad de externalizar la limpieza del hogar y la preparación de comida se ha convertido en todo un reto en la organización de la logística familiar y el reparto de tareas. El estudio, desarrollado en España entre el 4 y el 30 de abril de 2020 con una muestra de 7.091 personas, reparte las tareas domésticas en cinco grupos: limpieza del hogar, compra, ropa, comida y cuidado de los hijos (tanto el ocio como la educación) y analiza si la responsabilidad recae en el hombre, en la mujer, o en ambos por igual. Según los resultados se detecta que los hombres han aumentado ligeramente su participación en todas las tareas domésticas. Antes del confinamiento, el hombre se hacía cargo del 36% de las tareas domésticas, y menos del 10% hacía la mitad. Con el confinamiento, el hombre ha pasado a hacer una media del 40% de las tareas, y un 25% respecto al menos la mitad de las tareas. Sin embargo, la distribución sigue siendo desigual y recae mayoritariamente en las mujeres.

Sólo hay una excepción: hacer la compra. En este caso, el hombre ha pasado a ser responsable, en casi 10 puntos por encima de la mujer. Si antes del confinamiento se responsabilizaba de la compra en un 20%, con la nueva situación este porcentaje casi se duplica, y pasa a hacerlo en cerca del 38%, mientras que la mujer pasa del 38% a un 28%. «Ir a comprar o salir de casa durante la pandemia podía considerarse como una actividad arriesgada. Y la literatura nos demuestra que los hombres tienen una mayor preferencia al riesgo. Es decir, fundamentado en la teoría económica se podría decir que hombres y mujeres tienen diferentes preferencias por el riesgo que quieren asumir. Hay otras teorías menos económicas que sugieren que los hombres han ejercido su poder en una actividad que en este contexto podía suponer una liberación. También es una tarea que necesita menos inversión en capital humano porque es fácil de realizar. Nosotras sólo preguntábamos quién iba a comprar pero no quien hacía la lista y planificaba qué hay que comprar », añade el investigadora Lidia Farré.

También se ha detectado un aumento en la responsabilidad del hombre a la hora de cuidar de las criaturas en cuanto al ocio, que se reparte por igual. Farré se muestra optimista con la posibilidad de que el confinamiento abra una brecha en un reparto más equilibrado de tareas entre hombres y mujeres. «Estas situaciones forzadas donde el hombre ha tenido que asumir el papel de cuidador principal pueden implicar en cambios de roles de género dentro de algunas familias. Puede que en el futuro observamos que esta crisis ha tenido impacto en la distribución de las tareas del hogar », explica. «Nosotras también hemos estudiado los efectos de los permisos de paternidad y hemos observado que aquellos padres que disfrutaron de su permiso en España han incrementado su participación en las tareas de cuidado de los hijos e hijas. Hay un aprendizaje que hace que posteriormente se involucren más ».