El Ayuntamiento de Barcelona, a través del trabajo conjunto de la Concejalía de Promoción Económica, Trabajo y Feminismos y la Concejalía de Salud, Personas con Discapacidad y Estrategia contra la Soledad y Barcelona Activa, impulsa la Medida de gobierno ‘Barcelona hacia el derecho al cuidado (2025-2030)’ que marca la estrategia y las acciones necesarias para abordar los retos de los cuidados en la ciudad.
La medida parte de un diagnóstico exhaustivo de la situación. En 2040, una de cada cuatro personas de Barcelona tendrá más de 65 años. Ahora un 21 % de la población tiene más de 65 años. De estas personas, el 57 % son mujeres y una de cada cinco personas mayores vive sola.
Marta Villanueva Cendán, concejala de Salud, Personas con Discapacidad y Estrategia contra la Soledad, nos explica cuáles son los principales retos de esta hoja de ruta municipal y de la Tarjeta Cuidadora.
¿Cuáles son los aspectos más relevantes de la nueva medida de gobierno hacia el derecho al cuidado?
La nueva medida de gobierno quiere transformar la manera en la que se gestionan los cuidados en Barcelona. Parte de una idea clave: los cuidados no pueden depender solo de las familias, especialmente de las mujeres, sino que deben ser una responsabilidad compartida entre administraciones, comunidad y sociedad. Se reconocen los cuidados como un derecho universal y como un servicio esencial que debe garantizarse durante toda la vida. La medida apuesta por mejorar los servicios públicos, dar más apoyo a las personas cuidadoras, fomentar la innovación y dignificar las tareas relacionadas con los cuidados con una serie de medidas que está previsto que se desplieguen hasta el año 2030, con un presupuesto de 140.550.000 euros en seis años. Todo ello con el objetivo de reducir las desigualdades sociales y de género y hacer que Barcelona sea una ciudad donde cuidar y ser cuidado sea más fácil, justo y digno.
¿Qué aspectos de la medida de gobierno son más relevantes para las personas que cuidan, familiares y trabajadores/as del hogar y los cuidados?
La nueva medida de gobierno “Barcelona hacia el derecho al cuidado” contiene muchas acciones dirigidas a acompañar y apoyar a las personas que cuidan y trabajan en el sector de los cuidados, muchas de ellas mujeres y en situaciones de precariedad. La medida se basa en cuatro grandes ejes de acción que tienen un impacto directo y positivo en este colectivo. El primer eje quiere reforzar los servicios públicos, como el Servicio de Atención Domiciliaria (SAD), que se mejorará con nuevos perfiles profesionales y mayor calidad en la atención. También se pretende reducir tiempos de espera para acceder a ayudas por dependencia y ampliar guarderías y viviendas con servicios, para aliviar así la carga familiar de cuidados. El segundo eje da valor a los cuidados como sector económico de relevancia. Se creará un centro de formación e innovación en la calle Almogàvers con cursos, orientación y apoyo a las personas cuidadoras para promover su profesionalización, facilitar que encuentren trabajo o impulsar nuevos proyectos. Esto significa un mayor reconocimiento, mejores condiciones y oportunidades laborales reales. El tercer eje se centra directamente en las personas cuidadoras. Se reforzará la Tarjeta Cuidadora con más ventajas y apoyos, y se desplegará un nuevo Servicio de Bienestar y Cuidados Comunitarios en los barrios. Asimismo, se desarrollarán acciones para promover que los hombres compartan las tareas de cuidado dentro de las familias. Finalmente, el cuarto eje busca visibilizar y dignificar los cuidados, incluyéndolos como derecho humano en la nueva Carta de derechos humanos de Barcelona. Se establecerán alianzas con colectivos feministas y migrados para defender los derechos de las personas trabajadoras del hogar y los cuidados y para luchar contra las desigualdades y los abusos.
¿Qué novedades destacadas habrá en el espacio Barcelona Cuida y la Tarjeta Cuidadora?
El Espacio Barcelona Cuida seguirá siendo un punto de referencia para las personas cuidadoras, tanto familiares como profesionales del hogar y los cuidados, pero ahora se quiere consolidar y ampliar el papel para llegar a más personas y mejorar aún más el apoyo que ofrecemos. Destacamos:
- Ampliación de la Tarjeta Cuidadora: más servicios, actividades y descuentos pensados para las personas cuidadoras (salud, autocuidado, apoyo emocional, etc.).
- Despliegue del Servicio de Bienestar y Cuidados Comunitarios en los Casales de Barrio como antenas del Barcelona Cuida, con atención y orientación personalizadas, actividades para dar respuesta a las necesidades de las personas cuidadoras del barrio y acciones de difusión y derechos laborales lideradas por el Servicio de asesoramiento y acompañamiento jurídico para la contratación en el ámbito doméstico.
- Impulso a la difusión del Espacio Barcelona Cuida, con el objetivo de hacerlo más cercano y accesible a toda la ciudadanía.
Se habla de “corresponsabilidad” de los hombres en los cuidados. ¿Qué significa esto y cómo nos puede afectar?
Corresponsabilidad significa que cuidar tiene que ser una responsabilidad compartida por todos: mujeres y hombres, administraciones, comunidades y familias. Históricamente, las mujeres han asumido casi toda la carga de los cuidados, muchas veces sin reconocimiento ni ayuda. Esto ha provocado desigualdades, sobre todo en el ámbito laboral y de salud. Con la medida de gobierno, se quiere promover la implicación de los hombres en el cuidado cotidiano, con propuestas formativas que fomenten el equilibrio en el reparto de las responsabilidades de cuidados, campañas de sensibilización y más apoyo a proyectos que propongan la corresponsabilidad en los cuidados, también en el sector económico de los cuidados.
¿Cómo se apoyará a las personas profesionales que se dedican al cuidado dentro del nuevo modelo de economía de los cuidados?
La medida prevé un fuerte impulso a la profesionalización del sector. Se creará un centro de referencia para la innovación en cuidados en la calle Almogàvers, 165, con servicios clave para trabajadores y trabajadoras del sector, con lo siguiente:
- Formación y acreditación profesional a través de una futura care academy (academia de los cuidados), con capacitación para casi nueve mil personas.
- Apoyo al emprendimiento y a nuevos proyectos innovadores relacionados con los cuidados.
- Acceso a financiación y recursos para entidades del sector.
Con todo ello se quiere dignificar y profesionalizar el trabajo de cuidar, mejorando condiciones laborales y reconocimiento.
¿Qué ofrecerá el nuevo Servicio de Bienestar y Cuidados Comunitarios de los Casales de Barrio Comunitarios?
Este nuevo servicio se impulsará en ocho casales de barrio de la ciudad. Serán espacios de apoyo a las personas del barrio, especialmente, a las que cuidan o se encuentran en situaciones más vulnerables. Servicios cercanos de atención personalizada en los que las personas puedan recibir acompañamiento, apoyo emocional, asesoramiento y actividades comunitarias. El objetivo es evitar el aislamiento, facilitar la vida en el barrio y hacer que todo el mundo pueda tener una vida más autónoma y digna. Además, el servicio quiere reforzar la red entre el vecindario, las entidades y los profesionales, para construir comunidades más cuidadoras y conectadas.
¿Qué mensaje querría hacer llegar a las personas cuidadoras en el marco de la medida de gobierno?
Cuidar es fundamental para la vida y el bienestar de todos y todas. Es una tarea esencial para el éxito de las sociedades desarrolladas. En algún momento de la vida, todos y todas hemos necesitado y necesitaremos cuidados. Todas las personas tenemos derecho a ser cuidadas. Por eso es imperativo dignificar y reconocer esta tarea. Los cuidados no pueden continuar recayendo solo en las familias, y aún menos únicamente en las mujeres. El Ayuntamiento de Barcelona sigue asumiendo su responsabilidad y, con esta nueva medida de gobierno, da un paso firme para poner los cuidados en el centro de las políticas públicas.
Esta medida no se limita a apoyar a las personas cuidadoras y a las trabajadoras del hogar y los cuidados, sino que impulsa servicios, recursos y acciones concretas para hacerse cargo de lo que le corresponde como Administración pública. Se destinan más presupuestos y recursos, se mejoran los servicios, se reconoce y se dignifica el trabajo de cuidar y se trabaja para garantizar los derechos y las condiciones laborales de las personas profesionales del sector.
El objetivo es claro: hacer de Barcelona una ciudad que cuida, y que cuida también de las personas que cuidan de los demás.
