La reivindicaciones vecinales que reclamaban mejoras para los barrios prosiguieron y se continuaron ganando equipamientos culturales (bibliotecas, casales para jóvenes y personas mayores y centros culturales), educativos (guarderías y escuelas públicas), deportivos (polideportivos) y sanitarios (ambulatorios y centros de salud). También se trabajó en la mejora del transporte público (más líneas de autobús y metro), en la construcción de nuevas viviendas sociales y rehabilitación de las ya existentes, y en la ejecución de reformas urbanísticas encaminadas a mejorar la calidad de vida de sus habitantes (islas peatonales, ampliación de aceras, zonas verdes y reducción de la densificación). La transformación de Nou Barris estuvo acompañada de la marca La Nueva Barcelona, surgida en contraposición al término La penúltima Barcelona creado por los periodistas Josep M. Huertas y Jaume Fabré.

En 1996 Joan Clos sustituyó a Pascual Maragall en la alcaldía de Barcelona, continuando durante  los años siguientes con la misma política de renovación del distrito iniciada años atrás. Antonio Santiburcio, regidor de Nou Barris entre 1995 y 1999, apostó por extender el concepto “ciudad de diseño” hasta la periferia para regenerar los barrios del norte de Barcelona y contribuir a su integración en el resto la ciudad. Urbanísticamente, esta circunstancia quedó reflejada en el tipo de mobiliario urbano (bancos y farolas), en los monumentos (esculturas) y en el pavimento (baldosas rojas). En el año 1997 se constituye la sociedad privada municipal PRONOBA, que centra su actuación en la creación de bulevares, la potenciación de los ejes comerciales y del sector terciario, la creación de nuevas plazas y zonas verdes, la urbanización de calles e interiores de isla, la construcción de aparcamientos subterráneos, la mejora de la conectividad entre barrios y la ejecución de planes especiales de reforma interior.

Equipamientos, espacio público y vivienda

En Prosperidad, en el año 1992 se urbaniza un tramo de la calle Pablo Iglesias. En 1998 se remodela la plaza de la Zona Verde y también se urbaniza la plaza de Harry Walker.

En Porta, en 1993 finalizan las obras de construcción del Parc Esportiu de Can Dragó  sobre los antiguos terrenos de Renfe-Meridiana, y en 1994 se inaugura el nuevo Centre Cívic Porta-Sóller.

En 1994 se inaugura en Trinitat Nova el Parc de la Trinitat y el nuevo edificio del Ateneu Popular de Nou Barris, que se convertirá en la sede de diferentes entidades como la Escola de Circ Rogelio Rivel, los Diables de Nou Barris y el Arxiu Històric de Roquetes-Nou Barris (fotos).

La empresa de la Generalitat ADIGSA comienza a derribar en Verdún las degradadas Viviendas del Gobernador (foto) para sustituirlas por nuevas edificaciones, y se inician también las obras de rehabilitación de los bloques construidos por la Obra Sindical del Hogar, actuación que se extiende a los bloques de la misma promoción de Guineueta, Roquetes y Trinitat Nova. Esta rehabilitación estuvo acompañada de la urbanización de los espacios interiores y su ajardinamiento. Asimismo, se urbanizaron las plazas de Francesc Layret y de Joan Riera (fotos).

En el año 1995 se inaugura en Guineueta el edificio del Fòrum Nord de la Tecnologia al lado del edificio del Mental donde, en 1997, abrirá sus puertas la Biblioteca de Nou Barris (foto).

También en Guineueta, en los alrededores de la sede del distrito se aborda la primera fase de un nuevo gran pulmón verde, el Parc Central de Nou Barris (fotos).

En el Turó de la Peira, la masía de Can Basté reabrió completamente rehabilitada para acoger un centro cívico dedicado a  la fotografía (fotos) y se inició la construcción de los primeros bloques de pisos destinados a sustituir a aquéllos afectados por la aluminosis. En el paseo de Fabra i Puig se entregaron los primeros pisos para vecinos realojados.

En Vilapicina, se desmantelaron los talleres de reparación de autobuses y la plaza Virrei Amat duplicó su superficie.

Un nuevo espacio verde se inauguró en Canyelles en el año 1998, el parque de Josep Maria Serra i Martí.

Y, en 1998, el vecindario de Ramon Albó decidió por votación popular que el barrio pasara a denominarse Can Peguera.

Infraestructuras y movilidad

En lo tocante a la movilidad, en 1999 se convirtieron en bulevares los paseos de Fabra i Puig, Verdún y Valldaura (tramo superior) y la calle Doctor Pi i Molist. El concepto de bulevar consistía en la ampliación substancial de las aceras para devolver el espacio público a los peatones, al tiempo que se fomentaba el comercio y la vida ciudadana.

Además, el paseo de Fabra i Puig se abrió completamente hasta el paseo Valldaura y la Ronda del Mig se prolongó a través de las calles Ramón Albó, Arnau d’Oms, Piferrer i la avenida de Río de Janeiro.

En el ámbito del transporte, el metro fue incorporándose progresivamente en los diferentes barrios. Así, en 1999 la L4 de metro llegó hasta Trinitat Nova (fotos), y la estación de Roquetes de la L4 cambió su nombre por el de Vía Júlia. La red de autobuses extendió notablemente algunos recorridos por el interior del distrito hasta alcanzar una cobertura territorial óptima y mejoraron las conexiones con otros barrios de Barcelona mediante la prolongación de líneas.