El Molí de Finestrelles se ha sumado, este año, en el Barcelona Poesía, que ha tenido lugar en nuestra ciudad del 7 al 18 de mayo. Durante estos días, en la escuela se han trabajado, en todas las clases, una serie de poesías relacionadas con el agua. El motivo del agua no es una casualidad, puesto que este es un elemento central de la escuela. El molino de Finestrelles, que da nombre en el centro escolar, era hidráulico, por lo tanto el agua era el elemento generador de vida y es el eje temático que se está siguiendo para la creación de la gegantona del centro.
Algunos de los poemas que se han trabajado en las aulas son la Canción de lluvia de Segarra, A mineira eo mar, de Nêga Lucas, Seguido de las vistas en el mar, de Joan Maragall o Chansons lleva Djoliba, de Fobeda Queita, entre otros.
Con esta iniciativa, el profesorado, así como la Comisión de Formación y Coeducación de la AFA de la escuela, de quién surgió la idea originalmente, pretende acercar la poesía a los niños y hacerlos partícipes de los acontecimientos culturales que tienen lugar en nuestra ciudad.
“En lugar de poner música, durante estos días, hemos hecho la entrada y la salida de la escuela con las poesías escogidas. Además, cada tutor ha trabajado los poemas a clase”, explica la directora del centro, Mercè Colom Ordóñez.
Una gegantona que avanza cada día
La semana de la poesía al Molino de Finestrelles está íntimamente ligada a la creación de la gegantona, que tendrá que estar diseñada de cara en junio, cuando se acaben las clases. La construcción está prevista para el curso próximo.
La idea nace después de que la escuela cambiara su nombre y creara un nuevo logotipo y con la intención de “aportar identidad y acompañamiento en el camino educativo del centro”. Durante este proceso, el alumnado ha podido conocer de cerca el mundo tradicional geganter y se ha buscado fomentar el aprecio por el patrimonio cultural propio. “Buscando información en la mitología catalana, nos encontramos con personajes como las mujeres de agua, presente en las leyendas de todo Cataluña. Pensamos que sería una buena fuente de inspiración. También valoramos el hecho que fuera una gegantona, en vez de un gegantó, puesto que daría también mucho de juego para trabajar coeducación e igualdad de género”, explican desde el centro.
Para el curso próximo se prevé contactar con geganters profesionales para hacer la estructura, el modelado y el molde. Una vez acabada, se pintará, se vestirá y se elegirá la música que la represente. El proyecto acabará con el bautizo de la gegantona con una gran fiesta escolar.