La Escuela La Maquinista celebró el sábado 19 de marzo con una fiesta la instalación en su edificio definitivo en la calle Ferran Junoy, número 14. Aunque el nuevo equipamiento entró en funcionamiento al inicio del curso 2020-2021, las restricciones de la pandemia de la COVID-19 retrasaron el acto oficial de inauguración del equipamiento.
La inversión para la construcción del edificio definitivo ha sido de 6,5 millones de euros financiados por el Departamento de Educación. Durante la jornada se organizaron diversas actividades por todo el centro: talleres, danza, castillos, magia, música a cargo del grupo Tager y animación por parte de la colla tabalera. También se pudieron visitar los distintos espacios de la escuela.
La escuela consta de una superficie de 3.871,27 m2 y un patio de 1.650,57 m2. Los materiales utilizados para su construcción se han escogido siguiendo criterios de bajo mantenimiento y teniendo en cuenta la huella ecológica (cerámica, madera, caucho reciclado, lana mineral, fibra vegetal y yeso laminado…). En cuanto a la eficiencia energética, se ha velado por que todos los espacios tengan ventilación y renovación del aire; además de la máxima iluminación natural aprovechando la luz diurna.
El proceso hasta su ubicación definitiva
La Escuela La Maquinista abrió sus puertas en el curso 2010-2011, situándose en construcciones modulares en el solar en el que actualmente está ubicado el edificio definitivo. En 2016 se llegó a un acuerdo entre el Departamento de Educación y el Ayuntamiento de Barcelona para la construcción de un edificio definitivo. Para poder realizar las obras de construcción del nuevo edificio, en el curso 2017-2018 se trasladó la escuela de forma provisional a un solar situado en la calle Fernando Pesoa 10, y se fue trabajando con toda la comunidad educativa, de forma periódica y sistemática, con el fin de ir haciendo seguimiento de toda la obra.
El edificio provisional era modular aunque contaba con la tecnología de última generación en prefabricados y un nuevo concepto de distribución de los espacios escolares. La inversión de 2,9 millones de euros fue financiada por el Ajuntament de Barcelona.
Paralelamente, se fue trabajando con toda la comunidad educativa, de forma periódica y sistemática, a fin de ir haciendo seguimiento de toda la obra. En el mes de septiembre de 2020 abrió sus puertas el edificio definitivo, y actualmente se está trabajando para una futura ampliación del patio escolar.