Para este sindicato, “hay precipitación en la implementación y falta de planificación”. Critican que desde la Consejería de Educación no se haya tenido en cuenta “la necesaria formación pedagógica y didáctica que se tiene que realizar desde los mismos centros” y piden más recursos para la transformación educativa.
En este contexto, el pasado viernes 10 de febrero, CCOO, junto con la Asociación Catalana de Psicopedagogía y Orientación Educativa y Profesional, la Federación de Asociaciones Vecinales de Barcelona (FAVB), la Federación de Movimientos de renovación pedagógica de Cataluña, el Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras y en Ciencias de Cataluña, Badalona Fampas, Europa Laica, Canyelles Aprende, Colectivo de Escuelas Contra la Segregación, Sazón y el AEP, presentó, delante del Parlament de Catalunya, una ILP (Iniciativa Legislativa Popular) con el fin de exigir un mínimo del 6% del PIB a la educación. “Apostamos por un incremento de gasto en el sistema educativo con el objetivo que mejoren las condiciones de la escuela pública”, explica Aran Clemente.
En CCOO considerad que el enfoque educativo de los currículums supone un avance positivo, pero pedid más escucha, más recursos y más formación.
Tenemos claro que, como profesionales de la educación, nuestro propósito es ayudar a los niños y los jóvenes a orientarse en el camino académico con el fin de prepararlos para la vida. El gran problema que vemos a los currículums escolares es que suelen ser objeto de pugna política. Eso quiere decir que, en función del color político de los gobiernos, tanto autonómicos como estatales, se modifica hacia una banda o hacia otra la manera de enseñar. Lo que querríamos es que hubiera un acuerdo, un enfoque pedagógico, y que los currículums escolares se blindaran y pudieran ser útiles de generación en generación, adaptándolos, eso sí, a las necesidades de cada momento. La modificación constante mujer inestabilidad, y eso resulta negativo, no sólo para el sector de la educación, sino para cualquier ámbito.
En una entrevista hecha y publicada en el boletín del mes pasado, Iolanda Segura, portavoz del USTEC-STEs se mostraba crítica con una educación sólo basada en competencias, sin una base sólida de conocimiento.
Los nuevos currículums apuestan por un modelo que se aparta de la clase magistral y ponen en el centro al niño y el joven. EN CCOO consideramos que tenemos que superar al modelo tradicional y unidireccional y que esta batalla ya fue ganada en otro momento; pero que, efectivamente la implementación de las nuevas metodologías se tiene que hacer en condiciones. Tiene que haber un rigor y su desarrollo tiene que ser correcto, siguiendo los parámetros y los objetivos establecidos. Eso se hace recuperando los claustros pedagógicos y dando espacios y herramientas al profesorado y al resto de profesionales educativos.
Algunas voces críticas aseguran que la rebaja de horas lectivas y el aumento de autonomía de los centros de educación secundaria generará una desigualdad educativa que podría dejar atrás el alumnado más vulnerable.
Sí. En Sant Andreu mismo se ve la diferencia. Hay barrios con realidades diferentes, algunas más complejas que de otros; y eso se tiene que tener en cuenta. En este sentido, el aumento de autonomía de los centros escolares puede comportar un problema: la situación económica de las familias, los tipos de trabajo de los progenitores, su nivel de estudios, etcétera determina la vida de las personas, y también de los niños. El tema de la segregación en algunos barrios del distrito es preocupante y grave. Estamos en las puertas de la preinscripción escolar y es una oportunidad excelente para que las escuelas puedan mostrar el trabajo que hacen, porque en barrios desfavorecidos se hace muy buen trabajo, sólo hay que ver el caso del Tilo. No obstante, desde CCOO consideramos que la autonomía de los centros es un arma de doble corte. Por una parte, puede aportar cosas beneficiosas, siempre que se aplique de manera objetiva y transparente. De otra, está el peligro de que las direcciones de los centros se conviertan en cabezas de personal. El decreto de autonomía de los centros puede tener como consecuencia la adopción de modelos de liderazgo tóxicos, que no imperan, pero que existen. De hecho, en CCOO hemos conseguido que se admita a trámite una petición judicial con el fin de recuperar la democracia en los centros escolares. Nosotros creemos que se desvaneció con la adopción de este decreto.
¿Cree que los nuevos currículums pueden contribuir a una rivalidad no querida entre escuelas, que compiten con respecto a proyecto educativo?
Estamos convencidos de que la escuela inclusiva tiene que ser la finalidad a perseguir a corto plazo. Es fundamental que todo el mundo pueda acceder a una educación de calidad y universal; y eso se tiene que llevar a cabo en pie de igualdad entre todos los centros educativos. Sé que suena idílico, pero tendríamos que andar juntos para que todos los centros educativos tuvieran las mismas garantías de éxito. Los centros, dependiendo del suyos contextos, tienen que poder valorar y decidir las metodologías utilizadas porque éstas son las herramientas para conseguir los objetivos de aprendizaje y las competencias, y no son la finalidad. EN CCOO, sin embargo, cogemos estos retos como oportunidades y no nos gusta lamentarnos. El problema demográfico puede ayudar a desmasificar las aulas; eso sí, es obligación de la Administración aportar los recursos para que eso se haga de manera correcta.
A CCOO os habéis mostrado muy críticos con respecto a la adopción de nuevo calendario escolar.
El calendario es una de las puntas del iceberg de la cuestión de todo. Criticamos abiertamente la actitud impositiva por parte de la Consejería de Educación. En nombre de una supuesta transformación del sistema educativo, se toman decisiones sin consultar a nadie. Hay un sentimiento de malestar generalizado porque todas las decisiones se toman sin consultar, y creemos que se equivocan. Ni siquiera se ha consultado con el Consejo Escolar de Cataluña, formado por profesorado, familias, entidades, organizaciones, etcétera. Es cierto que no es un órgano vinculante, sino consultivo, pero se le hubiera tenido que preguntar. Ahora nos plantamos a las puertas del curso siguiente, se nos dice que la decisión ya está tomada y que está avalada por estudios, pero no ha habido nunca intención de abrir el debate entre los profesionales.