El plan, impulsado por el Consorcio de Educación de Barcelona y pensado de forma dinámica y colaborativa con una mesa de seguimiento plural, sigue lo que establece el punto 5 de los objetivos de desarrollo sostensible (ODS) de la ONU, que marca como prioritario “garantizar una educación de calidad, inclusiva y equitativa, y promover oportunidades de aprendizaje a lo largo de la vida para todo el mundo”.
Para avanzar en esta dirección, fija ocho ejes que permitirán evaluar, compartir o aplicar modificaciones.
- La plena capacitación de los equipos directivos y docentes: redes de aprendizaje, mentorías y propuestas formativas.
- La adecuación de los equipamientos educativos para la transformación educativa.
- La aceleración digital.
- Programas innovadores para el aprendizaje competencial conectado con el entorno.
- La equidad educativa.
- El impulso a la educación inclusiva.
- Equipos humanos más adaptados a los proyectos educativos e incorporación de nuevos perfiles socioeducativos.
- El entorno y las actividades extraescolares.
Foco en la educación secundaria obligatoria
Tratar de garantizar o facilitar el aprendizaje más allá de los 16 años tiene mucho que ver con la vinculación construida con el centro educativo, así como con la orientación dada al alumnado durante todo este tiempo.
Por eso, el plan pretende alcanzar una educación competencial vinculada a la realidad y que promueva el empoderamiento, la autonomía y la conciencia de que lo que se aprende tiene un sentido para la vida.
El objetivo es plantear aprendizajes profundos y duraderos que permitan desarrollar proyectos de vida de más calidad y equidad.