La serva padrona se estrenó en Nápoles, en 1733. Su función era modesta: debía representarse como entretenimiento durante los descansos de la ópera seria Il prigioniero soberbio, pero el público quedó embelesado y de una manera imprevista se convirtió en el paradigma de la ópera bufa y en la obra más célebre de Pergolesi. En París provocó en 1752, una violenta polémica entre los partidarios de la tragedia lírica francesa y los defensores de la ópera italiana, identificados con la Ilustración y la estética del clasicismo.
También habrá representaciones el sábado, 6, a las 20 h, y domingo, 7, a las 18 h.