El objetivo de las actuaciones en diversos parterres del Turó Park es la mejora de zonas que han sido sometidas a una fuerte presión ciudadana y a unos usos muy intensivos por parte del vecindario. Durante el confinamiento municipal y comarcal y la situación de crisis sanitaria de la covid-19 ha hecho que los parques y jardines hayan sido unos de los principales espacios de disfrute y contacto con la naturaleza en la ciudad.
Las tareas de siembra durarán unas semanas sin embargo, a fin de que el césped arraigue y se desarrolle correctamente le harán falta unos meses. Por lo tanto se prevé cerrar los espacios tratados y abrirlos al final del mes de junio.
Los céspedes de los parques de la ciudad de Barcelona son elementos muy sensibles ya que se trata de espacios pequeños, situados en espacios con una alta densidad de actividades en una ciudad como Barcelona que ya es una ciudad densa propiamente y donde la climatología seca no favorece el desarrollo de este tipo de espacios.
Por este motivo, requieren un grado de mantenimiento muy elevado y el hecho de ser pisadas y utilizadas de manera intensiva hace que se degraden muy rápidamente. Es por eso, que hace falta que se replanten de manera periódica.