A pesar de que Aristóteles (384-322, a.C.) ya decía que “el ser humano es un ser social por naturaleza”, no fue hasta hace poco más de una década que se empezó a estudiar como los bebés participan en el mundo social que los rodea. Comprender las expectativas ingenuas de los niños cuando observan los otros ayudándose, cooperando, compitiendo y agrupándose, nos ayuda a entender los límites de la supuesta naturaleza social humana.
Para asistir a la actividad, os podéis inscribir de manera gratuita en línea aquí.
Dirección: calle de Saragossa, 29 (espacio La Saleta, Vil·la Urània)