Urbanismo, Transición Ecológica, Servicios Urbanos y Vivienda

Proyectos como la transformación de los polígonos del Besòs o la implantación del modelo Supermanzana Barcelona permitirán a la ciudad impulsar cerca de 45.000 puestos de trabajo vinculados a la economía verde. El compromiso forma parte de una apuesta conjunta acordada en la cumbre mundial de alcaldes. Las grandes capitales reunidas en Buenos Aires han fijado el objetivo común de crear 50 millones de puestos de trabajo no ligados a los combustibles fósiles y que tienen que ayudar a limitar el calentamiento global del planeta y crear comunidades más sanas y justas.

En concreto, la Declaración C40 avala e incluye como ejemplos tres iniciativas de Barcelona: el impulso del modelo Supermanzana, la obra pública de alquiler y la rehabilitación de edificios y espacio público y el proyecto de regeneración urbana en los polígonos del Besòs. Por ejemplo, del nuevo modelo de calle de la Supermanzana Barcelona, destaca la sustitución del asfalto por materiales con una huella de carbono más baja, la mejora de los sistemas de recogida de agua y la creación de 8.000 puestos de trabajo.

Los trabajos verdes son los que desarrollan una actividad que se enfoca a reducir la contaminación y conservar los recursos naturales o los que no afectan de forma negativa al medio ambiente. Actualmente se necesitan 50 millones de puestos de trabajo verdes para que las ciudades puedan reducir a la mitad las emisiones según los objetivos del Acuerdo de París.

La presentación de la Declaración C40 ha dado el pistoletazo de salida en Buenos Aires de la cumbre mundial de ciudades, que agrupa las principales capitales del mundo que apuestan por trabajar conjuntamente por una recuperación económica justa y verde y que favorezca a todo el mundo. La cumbre la preside el alcalde de Londres, y Barcelona ocupa su vicepresidencia y lidera el grupo de ciudades europeas conjuntamente con Milán.