Urbanismo, Transición Ecológica, Servicios Urbanos y Vivienda

Hace un mes empezaron las obras de transformación de La Rambla en los tramos que van desde Santa Madrona hasta Canaletes. Y, paralelamente, ya se han terminado las obras del primer tramo, el que conecta el paseo con el mar, entre Santa Madrona y la estatua de Colón. Ahora ya es una muestra de cómo será la nueva Rambla: más amable, más verde y con más espacio para los peatones.

En el tramo acabado se ha actuado sobre unos 23.000 metros cuadrados. Se ha modificado el trazado de la avenida de las Drassanes, lo que ha permitido alargar La Rambla con un nuevo espacio urbano de llegada al frente del mar.

Se ha creado una nueva plaza con árboles que fomenta los usos sociales y renueva el encuentro entre el paseo, las Drassanes y Colom. El nuevo pavimento en todo el espacio es de piezas de diferentes formatos de piedra natural, concretamente, granito y pórfido.

El nuevo espacio tendrá más verde una vez se hagan las nuevas plantaciones (en septiembre, cuando bajen las temperaturas). Habrá un centenar de árboles, la mitad de los cuales serán nuevos, y alcorques más anchos con especies arbustivas.

El alumbrado se ha unificado con un único diseño más simple y funcional, y se han incorporado pilones a petición de la Junta Local de Seguridad.

Con respecto a la circulación, hay un único carril por lado, para bicicletas y autobuses, la distribución urbana de mercancías, los vehículos de servicios y el acceso a los aparcamientos, y ambos carriles están restringidos al tráfico vecinal.

El Ayuntamiento ha invertido 11,4 millones de euros en los trabajos de la primera fase de la reurbanización de La Rambla, que empezaron en octubre del 2022. Ahora continúan las obras en el resto de La Rambla, que se prevé que se terminen en el 2027.