Urbanismo, Transición Ecológica, Servicios Urbanos y Vivienda

A partir de mañana, las terrazas de Enric Granados y las de las plazas del Sol y de la Revolució, en Gràcia, tendrán que cerrar una hora antes para reducir el ruido y garantizar el descanso del vecindario. Se trata de una medida prevista dentro del Plan de reducción de la contaminación acústica en las calles y plazas declaradas zonas acústicamente tensionadas en horario nocturno (ZATHN).

El Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona (BOPB) ya incluye la aprobación definitiva de la resolución por la que se reducen los horarios de apertura de las terrazas situadas en estos espacios. A partir de mañana, entre semana, de domingo a jueves, tendrán que cerrar a las 23.00 horas, y los viernes, sábados y vísperas de festivos, a las 24.00 horas.

Esta decisión se adopta después de que los resultados de los sonómetros instalados en estos espacios hayan mostrado que se superan de manera continuada en 3 decibelios los límites permitidos de noche. Los resultados de las mediciones acústicas obtenidas, que se recogen en un informe elaborado por el Departamento de Evaluación y Gestión Ambiental de la Gerencia de Ecología Urbana, permiten concluir que el principal agente productor de ruido es la actividad de las terrazas de los establecimientos de restauración, asociada al ocio nocturno.

El eje de Enric Granados, declarado zona saturada de terrazas

El ámbito del eje de Enric Granados ha sido declarado zona saturada de terrazas y no se podrá consolidar ninguna de las terrazas extraordinarias que se otorgaron durante la COVID-19. De las 35 licencias extraordinarias, 31 solicitaron regularizarse y consolidar las mesas y sillas extras autorizadas durante la pandemia. Todas estas solicitudes han sido denegadas.

Con el fin de reducir el ruido y las molestias al vecindario también se estudia hacer obligatorio que las mesas y sillas tengan tapones de silicona y que las cadenas que aseguran los elementos de las terrazas estén plastificadas.