Economia Social i Solidària

Entrevista a Montse R. Faidella, presidenta de BiciHub, sobre movilidad, bicicletas y la construcción de la ciudad que queremos.

¿Cómo ha evolucionado el uso de la bicicleta en Barcelona?

En cuanto a infraestructura, se está ampliando y mejorando la red de carriles. Aún hay mucho trabajo por hacer, pero la experiencia como usuaria de la bici ha mejorado.

El impacto ambiental es un tema muy oído en la ciudad. Desde el BiciHub constatamos que hay más sensibilidad y concienciación por parte de la ciudadanía, aunque está claro que queda mucho camino todavía: se tiene que reducir el uso de vehículo privado, incentivando modelos de movilidad de impacto cero, como ir a pie, o más sostenibles, como la bicicleta o el transporte público. Todo eso es fundamental medioambientalmente, para mejorar la calidad del aire que respiramos, pero, como defendemos las entidades del BiciHub, también socialmente. Porque recuperar el espacio que antes estaba destinado a la circulación y aparcamientos de los vehículos privados nos permite destinarlo a la gente, para que pasen cosas, para que se vuelvan a tejer vínculos, para que los pequeños jueguen y la gente se relacione.

¿Por qué son importantes las bicicletas y cómo pueden transformar el modelo de ciudad?

Las bicicletas son importantes porque es una modalidad de transporte ideal para las distancias cortas y medias, dentro de la ciudad, puesto que permite prescindir del vehículo de motor. Todo eso está en sintonía con la lucha por la mejora del clima encarado hacia una mejora del clima en la emergencia climática, los gases emergentes y el CO₂. Ir en bicicleta supone aportar desde cada uno en esta lucha, a través de la movilidad sostenible para poder tener una ciudad más saludable. La bicicleta no contamina ni ambiental ni acústicamente, y tiene un bajo impacto con su producción y con respecto a los residuos, por lo tanto, contribuye a un modelo de ciudades más habitables y más adaptadas para la vida y las personas. Asimismo, es un modelo perfecto para la intermodalidad, es decir, para combinar con otros medios de transporte.

¿Cómo imagináis una ciudad más próxima a la bicicleta?

Una ciudad mucho más próxima a la bicicleta es la que hace muchas más infraestructuras seguras para que la gente se atreva a circular por la ciudad. Otra parte sería tener parkings seguros, para que no haya problemas de robos. Es evidente que la ciudad está pensada para el coche, se tiene que cambiar esta mirada porque realmente, dentro de Barcelona, es mucho más rápido y eficiente el transporte en bicicleta, caminar o el transporte público.

¿Qué papel jugaría aquí la ciclologística de última milla?

La ciclologística de última milla puede tener un papel clave al articular una lógica de transporte y distribución de mercancías más responsable con el entorno, con el territorio, y que no ocupa la vía pública ni contamina como los vehículos privados y de combustión.

En este sentido, en el BiciHub, el año pasado, gracias a las subvenciones municipales Enfortim l’ESS, impulsamos un proyecto de ciclologística de última milla: una Bicicargo comunitaria que la ciudadanía y las entidades pueden utilizar después de haber asistido a un curso de formación, que hacemos regularmente para la gente del territorio, sobre todo de aquí, del distrito de Sant Martí. La Bicicargo también se puede utilizar solicitando el servicio con una persona conductora.

Este es, pues, un modelo comunitario, de proximidad y de aprovechamiento compartido de recursos que favorece la amortización colectiva de vehículos, contribuye a reducir el uso de vehículos privados y permite la puesta en común de prácticas, maneras de hacer y conocimientos. De hecho, para desarrollar este servicio, hemos tejido alianzas con diferentes entidades de la ESS y del distrito, por lo que es un buen ejemplo de intercooperación.

Desde que empezó el servicio el año pasado, se está notando un crecimiento importante de su utilización por parte de entidades no solo del distrito. Y gracias a las formaciones para aprender a conducir la Bicicargo, las entidades y el vecindario se empoderan y pueden integrar esta nueva herramienta en su día a día o en su actividad profesional.

Más allá de las infraestructuras, ¿qué se necesita para fomentar este uso de la bicicleta?

Se necesita mucha educación. Hay que insistir en educar en la infancia, porque cuando coges estos hábitos ya de pequeño, de utilizar la bicicleta y no el coche, de ver los beneficios, cuando te haces adulto ya lo tienes integrado. También falta mucha educación hacia la ciudadanía en general. Hay mucha gente que no conoce la normativa actual de circulación en bicicleta y hay accidentes y malos usos que hacen a la gente ir insegura en bicicleta.

Y en este contexto de fomento del uso de la bicicleta, tenemos el BiciHub. ¿Qué es, exactamente?

El BiciHub es un proyecto colectivo que quiere transformar Barcelona en una ciudad más inclusiva, solidaria, ecológica y que promocione, sobre todo, la movilidad sostenible. Todo ello, enmarcado dentro de la economía social y solidaria (ESS). El BiciHub nace y se construyó en un proceso participado con muchas entidades del territorio, de la ESS y de la movilidad, que son sus tres ejes.

Como hub queremos aglutinar a todas las entidades de movilidad sostenible, no solo de la bicicleta, como puede ser Som Mobilitat con los coches eléctricos, la Asociación para la Promoción del Transporte Público (PTP) u otras entidades medioambientales y de territorio.

¿Qué servicios y actividades ofrece?

Como servicios ofrecemos la Bicicargo comunitaria, de la que hablé antes, pero también el Taller de autorreparación, un espacio que quiere acercar el mundo de la bicicleta a toda la ciudadanía del territorio, para que se empodere y ponga a punto su bicicleta. Porque una bicicleta a punto significa menos accidentes después, porque puedes tener cualquier susto por un mal mantenimiento de la bicicleta. Además, saber poner a punto nuestras bicis nos permite alargarles la vida y eso nos parece muy en línea con la economía circular y el consumo responsable… ¡Yo estoy usando la misma bicicleta que cuando empecé en la facultad!

También contamos con una oficina compartida para entidades del BiciHub. Cada entidad dispone de un puesto de trabajo, unas aulas que pueden utilizar y unos servicios, pero también forman parte del BiciHub y lo hacen crecer. En la oficina compartida actualmente hay cuatro entidades alojadas, con trece puestos de trabajo, todos ocupados. Además, ofrecemos espacios para usos puntuales, como el espacio Mario García Fernández, en recuerdo del compañero de Mensakas, donde se hacen asambleas, charlas, actos, exposiciones y mucho más. Y después, contamos con dos aulas que también se pueden ceder, por ejemplo, para reuniones o actividades formativas.

Hacemos visitas guiadas y jornadas de puertas abiertas, dirigidas a escuelas, entidades, organizaciones y la ciudadanía en general. Estas visitas son importantes para hacer pedagogía y fomento del uso de la bicicleta y de la movilidad sostenible.

Por último, desde el BiciHub impulsamos actividades divulgativas para dar a conocer iniciativas y proyectos en el marco de la economía social y solidaria: en temas como el consumo responsable, la economía circular, la transición energética y, por supuesto, la movilidad sostenible.

¿Y qué formaciones están disponibles en el BiciHub?

Sobre todo formaciones que permiten empoderar a las personas, especialmente a colectivos específicos, y a las entidades, formaciones vinculadas con la movilidad sostenible, la mecánica, todo desde una perspectiva feminista e interseccional. Por ejemplo, impartimos regularmente formaciones para aprender a conducir las Bicicargo, también hacemos formaciones de mecánica dirigidas a mujeres y personas no binarias o para personas que forman parte de un Bicibús. Este año, además, hemos impartido dos ciclos de formaciones de comunicación no violenta y formaciones para prevenir el acoso sexual en las organizaciones.

¿Cómo se vincula el BiciHub con los valores y los principios de la economía social y solidaria? ¿Cómo lo enmarcáis en la ESSBCN2030?

El Bicihub se alinea con la estrategia ESSBCN2030 desde sus inicios, y la movilidad sostenible en bicicleta ha sido nuestro principal eje. Impulsamos espacios de debate desde la movilidad con el objetivo de dar apoyo al consumo consciente y transformador, trabajamos para reducir la brecha de género en el sector de la mecánica y de la movilidad, visibilizamos la importancia de la ESS en el distrito, así como en el ámbito del área metropolitana, ya sea a través de las actividades formativas y divulgativas que organizamos, pero, sobre todo, gracias a los servicios abiertos que ofrecemos a la ciudadanía, como el taller de autotorreparación o la Bicicargo comunitaria.

La gran mayoría de las 21 entidades que forman parte del BiciHub son de la economía social y solidaria. Además, el BiciHub, como asociación, dispone de mecanismos colectivos de gobernanza, la asamblea, por ejemplo, o las comisiones temáticas. Y por lo que respecta a la transparencia, compartimos, en el web, documentos como los estatutos o las actas de las asambleas.

En la organización interna, apostamos por proveedoras de la ESS y, a ser posible, que sean de proximidad, y por la intercooperación en el desarrollo de actividades y servicios. Además, se prioriza el cuidado hacia las personas que formamos parte del BiciHub, con aspectos como la conciliación horaria.

Finalmente, el edificio Can Picó se reconstruyó bajo criterios de eficiencia energética, y se fomentan sistemas para minimizar los residuos y reaprovechar.

¿Qué apoyo recibís desde las administraciones públicas?

La Dirección de Servicios de Economía Social y Solidaria y Alimentación Sostenible y el Departamento de Economía Social y Solidaria del Ayuntamiento nos han acompañado en todo el proceso de la creación de la asociación y el sacarla adelante. Han estado acompañándonos desde nuestros inicios y conectándonos con Movilidad y Territorio. Tenemos desde el primer año un convenio a dos años con Movilidad y Economía Social y Solidaria, y estamos en conversaciones para renovar el convenio bianual. Es muy importante en este momento contar con el apoyo de la Administración, ya que el incremento de gastos con respecto a suministros del edificio no nos permite invertir en actividad como nos gustaría.

¿Qué le dirías a una persona que nunca ha cogido una bicicleta?

Al empezar el día yendo en bicicleta, lo ves todo más positivo. Te da mucha libertad y, cada vez más, la ciudad está más adecuada para moverse en bicicleta. Tenemos que respetarnos mutuamente, sobre todo ciclistas-peatones, y tener mucho cuidado con los vehículos de motor. Podemos convivir todos y todas, pero tenemos que ser conscientes de que no somos las únicas personas en la calle.