La Feria de Reyes de la Gran Vía reduce un 40% las paradas

07/12/2020 - 12:47 h

La Feria de Sant Tomàs y de Reyes, que es la encargada de cerrar la campaña de Navidad de este año, se podrá celebrar al fin después de que se haya garantizado que su celebración se ajusta y adapta a la actual situación sanitaria. Cubrirá el tramo de la Gran Vía entre las calles Muntaner y Rocafort, y estará abierta entre los días 18 de diciembre y el 6 de enero de 2021.

Este año la feria contará con un total de 157 paradas en los siete tramos de isla que hay entre las calles de Rocafort y Muntaner, un 40% menos que el año pasado. También se han establecido distancias entre grupo de stands, se instalarán barreras de separación para las personas (tipo catenaria) para garantizar distancias y se habilitarán sentidos únicos de circulación. Habrá agentes cívicos para controlar el aforo y se instalarán dosificadores de gel hidroalcohòlico en las entradas de cada tramo.

La feria quedará abierta desde las 10 h de la mañana hasta las 21 h, en los laterales de la Gran Via de les Corts Catalanes entre las calles de Muntaner y Rocafort.

Paradas de diferentes sectores:

  • Juguetes: 57 paradas que ofrecerán juguetes tradicionales y peluches, entre otros productos típicos de esta Feria, y que están ubicadas entre las calles Conde de Urgell y Muntaner.
  • Regalos: 69 paradas de productos tradicionales y artesanos y Comte d’Urgell.
  • Artesanía: este sector cuenta con un total de 20 paradas de artesanía catalana, entre las calles de Rocafort y Calabria.
  • Churrerías: 11 paradas, distribuidas por toda la feria.

La Feria de Reyes se suma a las tradicionales ferias de Navidad de la ciudad que ya están en marcha. La Feria de Santa Llúcia, del 23 de diciembre con un total de 121 paradas y la de la Sagrada Família, que acoge una cincuentena de paradas.

Este año, y de manera excepcional, se ha querido acompañar a los feriantes y garantizar la viabilidad y la celebración de las ferias navideñas por su carácter tradicional. Por eso se ha acordado la exención fiscal de las tasas que habitualmente graban este tipo de acontecimientos en el espacio público.

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