Esta campaña de prevención, coordinada por el Servicio Catalán de Tráfico (SCT), está orientada a reducir el riesgo de atropello y proteger a los peatones. Por eso, pondrá una atención especial en combatir las infracciones de los conductores de los diferentes tipos de vehículos, también los de movilidad personal, como los patinetes eléctricos.
En concreto, se corregirán infracciones que pongan en riesgo los desplazamientos a pie por la ciudad, como no respetar los pasos de peatones, la circulación prohibida por las aceras y las infracciones que se cometen en los espacios con prioridad para los peatones.
Los peatones implicados en siniestros de tráfico son uno de los colectivos más vulnerables, y los atropellos son los siniestros que causan lesiones más graves. En este sentido, la Estrategia de seguridad vial 2030 fija el objetivo de reducir en un 50 % el número de víctimas con lesiones graves y las muertes en esta fecha, y reducir a cero las víctimas mortales en el 2050. Según el último balance de siniestralidad, en el 2023 hubo un 4,8 % menos de siniestros y un 3,1 % menos de heridos en siniestros que en el año anterior.