Se recomienda a la ciudadanía que aumente la precaución y evite acceder a las playas, y se prohíbe el acceso a los espigones y entrar en el agua mientras haya bandera roja.
Este plan se activa en fase de alerta cuando hay un aviso de mal estado del mar, puede haber olas de más de 2,5 metros de altura con una probabilidad de más del 30 % y el mar se puede convertir en un peligro para las personas o hacer destrozos en el mobiliario.