Concretamente, la prueba piloto ha instalado en los comercios varios dispositivos: desde pantallas interactivas para conocer el perfil y los intereses de la clientela manteniendo en todo momento la privacidad de los clientes, hasta sensores para saber cuáles son las zonas más transitadas y los productos más buscados, así como controles de aforo para obtener estadísticas de los momentos de más afluencia. El objetivo final de la prueba es validar que la introducción de la tecnología en el establecimiento tiene un impacto directo sobre los indicadores de negocio de los comercios y poder extender el proyecto al conjunto del comercio de la ciudad. La digitalización de los negocios va más allá de tener presencia en internet: la prueba piloto ofrece la digitalización colectiva y el tratamiento de los datos como herramientas para mejorar el servicio y fidelizar a la clientela.
El proyecto piloto se enmarca en el laboratorio de comercio de nueva generación BCNRetailLab, la herramienta impulsada por el Ayuntamiento de Barcelona, a través de la Dirección de Comercio, Restauración y Consumo, y Barcelona Activa y del Círculo Tecnológico de Cataluña (CTecno) para llevar la innovación y la tecnología a los comercios de la ciudad, con la convicción de que la dinamización del comercio de proximidad es el motor de la reactivación económica y de la revitalización de los barrios. La inversión en este proyecto es de un total de 150.000 euros, financiados a partes iguales por el consistorio y el CTecno. A su vez, el proyecto forma parte del Plan de digitalización del comercio de Barcelona, que el consistorio puso en marcha con el inicio de la pandemia para reducir los efectos adversos de la crisis e impulsar la competitividad y la digitalización del comercio presencial para los próximos años.
Durante la rueda de prensa de presentación de la prueba piloto, Jaume Collboni, primer teniente de alcaldía y director del Área de Economía, Trabajo, Competitividad y Hacienda del Ayuntamiento de Barcelona, ha destacado que “la prueba piloto quiere demostrar que la digitalización puede reforzar también el comercio físico”. En este sentido, ha asegurado que “el proyecto permitirá preservar el comercio de proximidad de calidad y, por lo tanto, el ADN barcelonés”. En un mismo sentido, se ha expresado Joan Ramon Barrera, presidente del CTecno, que ha recordado que el proyecto “permitirá instalar dispositivos en los comercios, obtener datos de los consumidores y explotarlos, y usar la inteligencia artificial para idear mecanismos que fidelicen a la clientela y atraigan nueva clientela”. Para Montserrat Ballarín, concejala de Comercio, Mercados, Consumo, Régimen Interior y Hacienda del Ayuntamiento de Barcelona, “gracias a la tecnología se podrá mejorar la experiencia de compra en el pequeño comercio de la ciudad” y contribuir a mantenerlo en buen estado de salud. “Es un proyecto innovador y pionero a escala europea”, ha afirmado.
Las soluciones tecnológicas se han empezado a aplicar con Beabloo, la empresa catalana que se incubó en Barcelona Activa, ganadora del concurso para llevar a cabo esta transformación y conseguir cambios en las dinámicas de compraventa, y lo hace sin coste para los comercios y sin ganancias en esta fase piloto. Beabloo ya ha desplegado iniciativas de transformación digital en espacios comerciales de todo el mundo, singularmente en Europa, Estados Unidos y Oriente Medio, basadas en capturas y análisis de datos, cartelera digital y aplicaciones de inteligencia artificial para la creación de experiencias de compra personalizadas. Todo ello, a partir de la optimización de los espacios y la mejora del recorrido de compra de la clientela, y mediante el incremento de las ventas imaginando el comercio del futuro.
Un objetivo adicional en el proyecto del laboratorio es la interconexión y las promociones cruzadas entre comercios, desplegando una nueva forma de red digital sobre el barrio. Por lo tanto, este laboratorio empieza siendo un espacio de experimentación tecnológica y rápidamente pasa a ser clave en la validación de impacto económico en el negocio de los comercios a corto plazo, y un impulso en la competitividad basada en los datos, hecho que complementa e impulsa el valor humano de las interacciones personales.
En julio del 2021, se valorará el impacto en los comercios de las soluciones implementadas en las cuatro tiendas y se analizarán los resultados basados en consumiciones reales, y se detallarán los próximos pasos y las potencialidades de escalamiento en otras tiendas tanto de L’Eixample como ejes comerciales de la ciudad.
El proyecto de colaboración público-privada nace de una relación continuada con el CTecno. El CTecno, en cuanto que fundación abierta a las personas, empresas y profesionales de las TIC, quiere ser referente, dinamizador y punto de encuentro del sector de las TIC. En este sentido, el nuevo acuerdo es un ejemplo del poder transformador del sector tecnológico para el resto de los sectores.