A partir de ahora, los diez distritos de la ciudad disponen de un servicio de limpieza que dispone, entre otros recursos, de lo siguiente:
- Nueva maquinaria y adaptada a los diferentes espacios de la ciudad, como la limpieza de los carriles bici o a las zonas pacificadas.
- Equipos polivalentes para que puedan barrer, limpiar o recoger residuos según las situaciones que encuentren.
- Más frecuencia de limpieza en las zonas donde se ha identificado que hay más necesidad, en los parques y los contenedores.
- Más servicio de lavado con agua en más zonas de la ciudad y en turno de tarde y festivos para adaptar el servicio a los usos ciudadanos del espacio público.
- Plan de trabajo específico para cada barrio de la ciudad después de analizar las casuísticas, necesidades, auditorías del servicio y demandas del vecindario de cada territorio.
Una ciudad más limpia y un reciclaje más cómodo
En total, con la primera y la segunda fase de la implantación de Cuidem Barcelona se han incorporado al servicio 400 operarios y operarias más y 870 vehículos dotados de equipos insonorizados y menos contaminantes. En concreto, en esta segunda fase se han incorporado 534 vehículos nuevos un 67 % de los cuales son eléctricos.
Por otro lado, para conseguir reducir los residuos y cumplir los objetivos que marca Europa, se ha simplificado el modelo de separación de los materiales que van en el contenedor amarillo y se han instalado nuevos contenedores (en total, se sustituirán durante los próximos meses 12.600 contenedores) y se ha implantado un nuevo modelo de distribución de los contenedores de residuos para agrupar todas las fracciones en una única ubicación, siempre que sea posible, o para agrupar todos los contenedores de recogida selectiva.
Otra de las novedades del servicio es la mejora de los canales de comunicación para poder notificar incidencias. Los vecinos y vecinas pueden hacerlo de forma más fácil y ágil a través de la web cuidem.barcelona, que también incluye un buscador para facilitar el reciclaje de residuos.
De la misma manera que se hizo en marzo, en los cinco distritos de la segunda fase del despliegue también se hará una campaña informativa que explique las características del nuevo servicio y las especificidades que se implantarán en cada uno de los barrios. Y a partir de octubre se celebrarán cerca de una cincuentena de comisiones de seguimiento barrio a barrio, un espacio conjunto entre el vecindario, los distritos y el área de limpieza y recogida de residuos para compartir el funcionamiento, la evolución del servicio y las propuestas de mejora.
El nuevo servicio de limpieza y recogida de residuos se enmarca dentro del plan Cuidem Barcelona, de mantenimiento integral del espacio público, que tiene una inversión de 2.300 millones de euros para los próximos ocho años.