Actualmente la ciudad dispone de 113 espacios para la recarga eléctrica, el 80,6 % se encuentran en aparcamientos públicos y el resto en la vía pública. La mayoría son o bien exclusivos para motocicletas o bien puntos abiertos a todo tipo de vehículos eléctricos. El resto son puntos de carga semirrápida y rápida, exclusivos para taxis o para vehículos de distribución urbana.
Los 550 puntos de suministro eléctrico que la nueva regulación del Ayuntamiento de Barcelona prevé se encontrarán principalmente en aparcamientos de acceso público y también en torno a las rondas y los polígonos industriales, donde hay más volumen de vehículos privados. Se distribuirán por toda la ciudad teniendo en cuenta las zonas de más afluencia de vehículos.
Se implantarán tres tipos de instalaciones de recarga eléctrica o de intercambio de baterías:
- Electrolineras: Serán instalaciones de recarga eléctrica de pago para vehículos eléctricos o híbridos. Las gasolineras que hay en Barcelona podrán reconvertirse para poder ofrecer este servicio en sus estaciones.
- Estaciones de recarga o intercambio de baterías: Se ubicarán en aparcamientos, subterráneos o en la calzada, en régimen de explotación horaria o rotación y en aparcamientos de centros comerciales. Los puntos de carga se encontrarán en la planta baja o en la planta -1.
- Puntos de intercambio de baterías: Serán espacios para el intercambio de baterías extraíbles de vehículos de movilidad personal como bicicletas o patinetes eléctricos.