Una stolpersteine delante de la casa de Joan de Diego

31/05/2023 - 15:58 h

En el marco del proyecto educativo Stolpersteine Barcelona, alumnos del Instituto Escola Sicília han colocado este miércoles 31 de mayo un adoquín de la memoria en la calle de Sardenya en recuerdo a Joan de Diego, que sobrevivió al campo de concentración de Mauthausen y ayudó a salvaguardar las pruebas de los crímenes cometidos en el campo.

Con esta acción culmina la segunda edición del proyecto pedagógico Stolpersteine Barcelona, coordinado por la concejalía de memoria Democrática junto con las amicales de Mauthausen y de Ravensbrück, y que ha implicado los y las estudiantes de un total de nueve institutos de la ciudad, que en los últimos meses han estudiado las biografías de doce vecinos y vecinas de la ciudad que sufrieron el horror nazi.

El alumnado del Instituto Escola Sicília ha trabajado la biografía de Joan de Diego, que se sabe que creció en la calle de Sardenya 190. Al producirse el golpe de estado, el joven barcelonés se alistó a las Milicias Antifascistas dentro de la columna Karl Marx y participó en la batalla del Ebro. En febrero de 1939 pasó a Francia y, alistado en el ejército francés, acabó prisionero de los alemanes. A partir de aquí, inició un periplo por varios stalags hasta llegar a Mauthausen en el primer convoy con republicanos deportados, el 6 de agosto de 1940.

Después de un tiempo trabajando en la pedrera, una serie de circunstancias propiciaron que acabara trabajando en la Secretaría del campo, donde ejercía el cargo de tercer secretario. Desde esta posición, y junto con otras personas, llevó a cabo una serie de acciones de solidaridad que salvaron la vida de algunos compañeros. También contribuyó a salvaguardar las pruebas de la criminalidad practicada en el campo.

Además del adoquín de la memoria que recuerda a Joan de Diego, durant el mes de mayo en l’Eixample se han colocado dos adoquines más. El 19 de mayo, el Instituto Infanta Isabel de Aragón (Sant Martí) colocó una stolpersteine en la calle de Roger de Llúria, 21, en homenaje a Secundina Barceló Mirambell, que fue detenida por la Gestapo en julio de 1944 por pertenecer a la Resistencia y enviada al campo de Ravensbrück, del cual consiguió salir con vida.

El 23 de mayo, el Instituto Teresa Pàmies (Horta-Guinardó) colocó un adoquín dorado delante de la calle de Aribau, 68, en homenaje a Josep Miret Musté, que trabajaba en la Escuela del Trabajo y de joven destacó como jugador de rugby. Exiliado en Francia, en 1942 fue detenido en París y aprisionado en La Santé y Fresnes, desde donde fue deportado a Mauthausen en agosto de 1943 y trasladado a Floridsdorf, un kommando externo de Mauthausen. Fue asesinado el 17 de noviembre de 1944 por un S. S.

Podéis consultar más información sobre el proyecto Stolpersteine Barcelona y las biografías de los doce vecinos y vecinas homenajeados en este enlace.