Ángel García (Almería, 1977)
Atender la herida sufrida de una hemorragia permanente.
Curar las llagas de mi boca de tanto silencio.
Escuchar los latidos de mi corazón como campanas de celebración.
Bautizar mi nombre para purificar mis demonios.
Defender mi lugar sin necesidad de una guerra.
Alzar una bandera blanca para proclamar libertad.
Vomitar palabras para manchar de verdad los muros.
Abandonar la exigencia para dar lugar a la esperanza.