“La música en las iglesias evangélicas es una expresión de gozo, llena de esperanza, y refuerza la presencia de Dios”, Paul Ogabor
La Oficina de Asuntos Religiosos (OAR) colabora con el ciclo Trànsits, organizado por el Museo de la Música de Barcelona. En este ciclo de charlas, conciertos y liturgias se explorará el papel que tiene la música en la práctica religiosa y la vida espiritual de diferentes comunidades religiosas presentes en la ciudad de Barcelona. El ciclo ha continuado este 2023 con “Paths of the soul, la música de la New Covenant Church” y la conversación “La música en las iglesias evangélicas”.
La siguiente sesión del ciclo “Trànsits, les músiques de l’esperit” (Museo de la Música de Barcelona, con la colaboración de la #OarBCN) fue una conversación titulada “La música de las iglesias evangélicas”, que tuvo lugar el día 23 de febrero en el Museo de la Música de Barcelona. Participaron Paul Ogabor, nigeriano de origen y miembro de la New Covenant Church, y Didier Likeng, camerunés de origen y músico de góspel que creció en una iglesia presbiteriana, especialista en espirituales negros y profesor de la Escuela Superior de Música de Cataluña (ESMUC), y la moderación fue a cargo de Maria del Mar Griera, directora del Grupo Investigaciones en Sociología de la Religión (ISOR). El domingo 26 de febrero, la comunidad de la New Covenant Church o Iglesia de la Nueva Alianza de Barcelona, con origen en Nigeria e integrada por personas de diferentes nacionalidades con la voluntad de transformar la vida en consonancia con la huella y la palabra de Jesús, abrió las puertas para compartir con música su vitalista celebración del culto dominical.
El día 23 de febrero la conversación giró en torno a la música góspel, que se escucharía en el culto del domingo 26 de febrero en la iglesia de Paul Ogabor, en la que la música góspel tiene preeminencia, pero no se tiene que olvidar la himnología, música básica para las iglesias evangélicas catalanas tradicionales.
La conversación se inició con un salto a la infancia de los dos ponentes. Tanto Didier como Paul recordaron que el interés por la música se les manifestó desde pequeños. Paul aseguró “que llevas algo dentro como africano”. Los dos provenían de entornos cristianos, y relacionan su infancia y su experiencia con la música y con lo sagrado. “Calificar el estilo de la música góspel tiene sentido en Europa, pero no en África, ya que esta va ligada a la sonoridad, al ritmo, a otros aspectos no europeos”, comentó Didier. Las iglesias evangélicas o protestantes utilizan la música para celebrar lo divino. Paul continuó y afirmó que, para él, como miembro de la New Covenant Church, “la música es el alimento del alma, que permite conectar nuestro espíritu con Dios”.
Maria del Mar Griera prosiguió la conversación y dijo que “la música crea comunidad”, y es exactamente así, afirmó Didier, “la música es un vector de vínculo”, y puso el ejemplo del cierre por la pandemia de la COVID-19, cuando comunidades de vecinos, amigos y amigas se unieron en momentos en los que la música fue protagonista. Sin embargo, puntualizó que los cantos deben interpretarse con convicción, porque si no se hace así pierden todo el sentido. Paul dijo que “la música cristiana es una expresión de gozo, llena de esperanza, que aporta motivación y refuerza la presencia de Dios” en la comunidad. Se vuelve esencial y, además, “esta música crea sensaciones diferentes e impacta de manera diferente en los miembros de la comunidad de la iglesia”.
Volviendo a una esfera más histórica del góspel, Maria del Mar Griera interpeló a Didier en este campo, en el que es especialista: “la música góspel es de inspiración protestante, concretamente anglicana”. Se remonta al siglo XVII, momento en el que muchos de los traficantes de esclavos ingleses predicaban la fe cristiana protestante, en sus centenares de modalidades, solo para mantener sumisos a sus cautivos (“los mansos heredarán la tierra”). Las personas esclavas cantaban espirituales negros, que son adaptaciones populares de himnos religiosos evangélicos. Y añadió: “En 1865 se abolió la esclavitud, y no podemos olvidar que fueron aproximadamente 200 años de sumisión”. Consecuentemente, se dejaron de cantar los espirituales negros, y es aquí donde “aparece el góspel y la alabanza a Dios”. “El góspel no es un estilo musical”, según Didier, “es una música eterna que siempre ha bebido de la música del momento y ha sido influida por ella”. En la música góspel, los estilos han evolucionado de distintas formas y se han creado diferentes subgéneros a lo largo de los años, pero dentro del cristianismo evangélico o protestante (especialmente en la rama pentecostal) es una parte muy importante del culto de alabanza hacia Dios y Jesucristo para todas las comunidades. Didier matizó que, a pesar de las influencias, “el texto y el mensaje serán inalterables”. Es “algo sagrado que está al servicio de la religión” y ahora el góspel se canta con un mensaje de gozo, a diferencia de los espirituales negros. Acto seguido, Maria del Mar Griera preguntaba si la música góspel tiene continuidad, si hay una línea común, entre las diferentes iglesias. Una pregunta que Paul contestó, tal como lo había hecho Didier: “El góspel bebe de la cultura de su entorno”. A pesar del resurgimiento de esta música en los siglos XIX-XX, el góspel en todas las iglesias evangélicas “transmite el mismo mensaje, la misma sensación y la misma emoción de gozo”.
Hoy en día, las iglesias evangélicas son espacios de innovación y creación musical. A continuación, Maria del Mar Griera preguntó: “¿Qué papel tiene la música góspel en un mundo tan secularizado, como, por ejemplo, aquí, en Cataluña?” Según Didier, “depende del tipo de iglesia, ya que hay muchas denominaciones”, pero todo reside en el hecho de que “la música cristiana es una música de comunión, que crea comunidad”. Con el bagaje como experto en este tipo de música, afirmó que “el mejor o la mejor cantante o el mejor coro es aquel que tiene algo que decir”, ya que la iglesia “se tiene que convertir en un lugar para expresar la fe, tiene que ser un espacio, una comunidad, que debe moverse hacia los demás”. Paul añadió que, a pesar de las diferencias entre iglesias, “todas tienen la capacidad de emocionar y de enseñar”. En este mundo secularizado, el góspel, como muchas otras músicas originariamente religiosas, se puede considerar, según la evolución, música religiosa y música secular y, aparentemente, esta relación se puede volver compleja y tensa. Según Didier, “es evidente que dentro de las iglesias evangélicas hay diferencias”, como también hay diferencias dentro de la Iglesia católica u otras tradiciones religiosas y sus manifestaciones. Como músico experto, comentó que “hay que saber para qué sirve la música y no tanto de dónde viene”. Didier manifestó que, para él, este debate entre música religiosa y música secular, en el góspel, “es un debate falso”. Maria del Mar Griera le preguntó si, según él, “se puede cantar góspel sin creer en Dios”. “Rotundamente sí”, respondió Didier, ya que considera que “si Jesucristo para los cristianos es un amigo fiel, el góspel es una manera de decir ‘gracias’ a un amigo fiel, siempre con respeto”. Aunque no se sea una persona creyente, la música góspel “es un espíritu de encuentro y de fraternidad entre los unos y los otros”.
A diferencia de otras músicas, el rol del cuerpo es importante en el góspel, y después de la abolición de la esclavitud, afirmó Paul, “se vuelve a cantar con los ritmos y los movimientos africanos”. Igualmente, el coro de cantantes de acompañamiento de fondo es importante; por lo tanto, “si el coro está enfermo, la iglesia está enferma”, porque la iglesia son las personas, no el espacio físico. Es por eso por lo que a pesar de que ahora la New Covenant Church tiene un centro de culto, sus inicios se encuentran en la comunidad de personas. Paul explicó que la formación de esta iglesia no estaba prevista, nació “por azar en el 2001”, cuando él y su mujer visitaron Barcelona. En aquel momento vieron a personas necesitadas, y decidieron quedarse, ya que, según su fe: Give hope to the hopeless, help the needed, guide who need to be guided (Da esperanza a los desesperados, ayuda a los que lo necesitan, guía a los que necesitan ser guiados). En relación con la comunidad, que es clave en las iglesias evangélicas, la de la New Covenant Church la formaron algunas personas que se reunían en la peluquería de un amigo. Poco a poco fueron aumentando el número de fieles, y, después de pasar por diferentes locales, se establecieron en el local que tienen actualmente en el distrito de Sant Andreu. Desde los inicios tuvieron un coro de personas aficionadas, no profesionales, que se ha ido manteniendo, y reciben clases de manera interna. No tienen a ninguna persona profesional que les enseñe pero esperan, a la larga, poder disponer de una. Mientras tanto, procuran que los integrantes puedan recibir clases profesionales fuera de la iglesia.
Después de la conversación, el domingo 26 de febrero tuvo lugar el culto tradicional de la New Covenant Church, con la iglesia llena a rebosar de asistentes que siguieron los sermones y los cantos de góspel, con el ritmo musical, las voces y la emoción de las personas fieles.