El Ayuntamiento de Barcelona, a través del Instituto Municipal de Paisaje Urbano, ha dado a conocer los 10 proyectos ganadores del segundo concurso de cubiertas verdes de Barcelona, una iniciativa que promueve la implantación de nuevos terrados verdes, con impulso de la ciudadanía y favorecer que la ciudad sea más habitable, saludable, sostenible y autosuficiente. En total, se han presentado un total de 47 propuestas, 33 de las cuales pasaron a la segunda fase del concurso. De estas propuestas han salido los 10 proyectos ganadores y los 10 accésits.
Proyecto calle de Manuel de Falla, 34
En Sarrià – Sant Gervasi, la cubierta seleccionada se encuentra en la calle de Manuel de Falla, 34. Se trata del terrado de una finca de 12 viviendas con una superficie de cubierta de 236 metros cuadrados y una superficie verde de 155 metros cuadrados.
El espacio contará con un huerto urbano, un espacio de biodiversidad y energías renovables, además de lugares de reunión para disfrutar del verde al terrado.
Los proyectos recibirán una subvención del 75% del coste, con un límite de 100.000 euros por cubierta. Las obras empezarán a lo largo del año 2021 y finalizarán durante el año 2022. Los diez proyectos ganadores han supuesto un incremento de 5.500 metros cuadrados de verde en la ciudad.
Enverdecer la ciudad con cubiertas verdes
Las cubiertas verdes son uno de los elementos clave para conseguir una ciudad más verde y sostenible, y para contribuir a la adaptación de los efectos provocados por el cambio climático.
A partir de medidas como la Declaración de Emergencia Climática, el plano Clima o el Programa de impulso a la infraestructura verde urbana el Ayuntamiento de Barcelona pretende incrementar la superficie de cubiertas verdes, tanto públicas como privadas.
¿Sin embargo, en qué consisten las cubiertas verdes? Una cubierta verde puede incluir espacios verdes, huertos urbanos de autoabastecimiento, espacios de uso social o de captación de agua de la lluvia, y es compatible con la instalación de energías renovables. De esta manera se aportan múltiples beneficios: en las relaciones sociales, en los efectos que tiene en el confort térmico y la calidad del aire, en la creación de nuevos espacios verdes, en el paisaje urbano, y favorece la biodiversidad en el ciclo del agua de la ciudad y en el ahorro energético.
Además de contribuir a hacer de Barcelona una ciudad resilient ante la crisis climática, las cubiertas verdes aportan un beneficio colectivo y social para los vecinos y las vecinas, que ganan espacios de estancia y ocio en sus edificios y desarrollan una actividad que fomenta la cohesión social.
En el 2017 el Ayuntamiento de Barcelona abrió el primer concurso de cubiertas verdes, en el cual se presentaron un total de 45 propuestas.
Uno de los 10 proyectos ganadores de la anterior edición en el año 2017, fue la propuesta de la escuela Salesianos de Sarrià, en la calle de Sant Joan Bosco, del distrito de Sarrià – Sant Gervasi. La cubierta verde está situada en una pérgola en medio del patio de la escuela, con gran impacto a las edificaciones de los alrededores, donde se sitúan las aulas.
El proyecto, que tuvo un coste total de 70.874 €, incluyó 191 m2 de superficie verde, una cubierta extensiva con plantas tapizando y arbustivas en la barandilla, un sistema de generación de energía mediante placas fotovoltaicas, un hotel de insectos y un sistema de riego por goteo con sensores de humedad.