La caída libre del Tibidabo se llamará Merlí y se estrenará a finales de mayo

03/05/2024 - 08:03 h

La nueva atracción enfila la fase final de su instalación, tendrá 52 metros de altura y ofrecerá una visión de 360º sobre Barcelona

La esperada gran novedad de la temporada 2024 del Tibidabo ya tiene nombre. La nueva caída libre se llamará Merlí y se pondrá en funcionamiento a finales de mayo. El Parc d’Atraccions ha finalizado su montaje esta semana, de manera que los visitantes del espacio ya pueden ver este nuevo elemento de la skyline de Barcelona.

El nombre de la caída libre surge de un concurso realizado entre los trabajadores de BSM, la empresa encargada de la gestión del Parc d’Atraccions Tibidabo, y se inspira en la temática y el diseño de la atracción, que simula una varita mágica culminada con una estrella.

¿Cómo funcionará?

La magia también estará presente en la experiencia de una atracción de 52 metros de altura, que elevará a los visitantes a 500 metros sobre el nivel del mar, desde donde disfrutarán de las mejores vistas sobre Barcelona antes de vivir la caída.

Merlí será uno de los principales reclamos del Tibidabo para la temporada 2024, en la que espera superar a los 700.000 visitantes y las 22.500 familias socias del Tibiclub.

Inicio de una temporada llena de novedades

A la espera del estreno del Merlín, el Parc inauguró temporada el pasado 2 de marzo con diversas novedades, como el nuevo espacio CreaTibi by Lego Education, que cuenta con la colaboración de Abacus Educación. En sus primeras semanas en funcionamiento, los niños y niñas que lo han visitado han podido experimentar con la robótica y la ciencia en una propuesta que se inspira en la llegada de la mujer a la luna.

El Parque también ha renovado sus miradores y la experiencia de terror del emblemático Hotel 666. Además, recientemente ha inaugurado el Espacio 666, donde los visitantes pueden conocer y hacerse fotografías con los personajes de este terrorífico alojamiento.

Junto con las nuevas experiencias, el Tibidabo seguirá reforzando su compromiso con la sostenibilidad, la solidaridad y la educación con el objetivo de ser mucho más que un parque de atracciones. Algunos de los proyectos que constatan esta ambición son la alianza con Unicef por la defensa de los derechos de los niños por todo el mundo; la celebración de jornadas solidarias en colaboración con entidades como Educo, Aprendemos Autismo o Fanoc, entre otros; o la programación educativa, con nuevas ediciones del Fisidabo y del Mes de la Física, organizadas junto con la UPC por la promoción de vocaciones científicas y tecnológicas entre el alumnado.

En el eje de la sostenibilidad, la Cuca de Llum crece como emblema de la estrategia medioambiental del Parc y referente de la movilidad colectiva sostenible. Se espera que el Funicular del Tibidabo llegue a los 900.000 viajes en éste 2024.