El Taller Masriera enseña su interior durante el 48 h Open House

24/10/2020 - 15:38 h

Este edificio singular, adquirido recientemente por el Ayuntamiento, ha abierto puertas por primera vez y de manera excepcional con motivo del festival. La finca está catalogada como bien cultural de interés local. Es obra del arquitecto Josep Vilaseca i Casanovas y fue construido el año 1882 como taller de pintores y escultores.

El Taller Masriera, una de las joyas escondidas del barrio de la Derecha del Eixample, y ahora propiedad del Ayuntamiento de Barcelona, ha abierto sus puertas en el marco del 48 h Open House Barcelona, festival de arquitectura que celebra su undécima edición. La Asociación de Vecinos de la Derecha del Eixample ha aprovechado la jornada de puertas abiertas para celebrar la recuperación de este edificio.

Por primera vez y de manera excepcional, el sábado 24 de octubre se ha podido ver el interior de este edificio singular, en el cual destaca un viejo teatro. El objetivo de futuro es destinar la finca a equipamientos comunitarios del barrio una vez haga un proceso participativo para definir sus usos y se pueda ejecutar el proyecto de rehabilitación integral necesario.

La finca está incluida en el Catálogo de Protección del Patrimonio de la ciudad como bien cultural de interés local. La principal característica del Taller Masriera es su singularidad, tanto con respecto al estilo como a su entorno, y el jardín que tiene delante, en la calle Bailèn 70-72. Consta de planta baja, dos plantas de piso y planta sótano, con una superficie de suelo de 1.356 m² y una superficie construida de 1.861 m².

Las visitas guiadas han sido con cita previa y con plazas limitadas para cumplir con las condiciones sanitarias y de aforo impuestas por la Covid-19. En el exterior se han hecho actividades en un espacio delimitado, como un taller de pintura meditativa con boles de cuarzo y gong y un concierto de música clásica.

Historia del Taller Masriera

El Taller Masriera, obra del arquitecto Josep Vilaseca i Casanovas, fue construido el año 1882 como taller de pintores y escultores, y es considerado una construcción de estilo neoclasicista. A primer vistazo destaca una gran fachada emblemática. Definido en su tiempo como un “templo del arte”, el arquitecto recurrió a la recreación de un templo clásico hexástilo y próstilo, con columnas y pilastras de fuste acanalado rematadas con capiteles corintios en la perístasis.

En los años veinte, una profunda reforma transformó el espacio en un pequeño teatro, denominado “Stadium” donde actuaba la compañía “Los Polvorillas”. Toda esta actividad quedó suspendida por la Guerra Civil y fue reanudada el año 1939 con una intensidad más modesta. La sala “Studium” se convirtió en la sede de la sociedad teatral Club Helena, que mantuvo programación de teatro y cine. En los años cincuenta el edificio fue vendido a la entidad católica Centro Social de Actividades Culturales y Religiosas, y se instaló una comunidad de religiosas de la Compañía del Sagrado Corazón hasta el año 2009, cuando cedieron la finca a la Fundación Privada Pere Relats.