A las 2.700 personas sin hogar que ya había en la ciudad, ahora se han sumado un centenar de plazas más en uno de los pabellones de Fira de Barcelona. Además, desde noviembre también se dispone de un centenar más de plazas en dos equipamientos extraordinarios que se activaron cuando se puso en marcha la fase preventiva de la operación Frío.
El operativo también prevé el despliegue de diferentes equipos sociales que ofrecen a las personas que duermen en la calle la posibilidad de desplazarse a este nuevo centro de acogida. El Centro de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB) lo coordina, y cuenta con la colaboración de la Cruz Roja y la Guardia Urbana de Barcelona. La previsión es que este dispositivo específico de intervención se alargue dos o tres días, hasta que la situación meteorológica mejore.
Durante el 2020 el Ayuntamiento ha aumentado el presupuesto para atender a personas sin hogar en un 30 %, y ha destinado a este fin unos 45 millones de euros.