Seis meses después de la puesta en marcha del túnel en sentido Besòs, el domingo 3 de abril a las 8 de la mañana estará operativo el túnel en sentido Llobregat.
Con los dos sentidos del túnel ya abiertos, se liberará de manera definitiva todo el espacio que ahora ocupan los vehículos en superficie en la Gran Via de les Corts Catalanes entre las calles de Bilbao y Padilla, generando un nuevo espacio para la ciudadanía libre de coches, para los cuales los peatones, el vecindario, el verde y los usos alternativos en el del vehículo privado estén a los protagonistas.
Modificaciones a la movilidad actual Durante los primeros días de puesta en servicio del nuevo sentido del túnel, la Guardia Urbana de Barcelona reforzará su presencia en la zona.
La principal novedad en la movilidad de este ámbito es que en la Gran Vía entre la calle Bilbao y la calle Padilla no habrá tráfico de paso y sólo podrán desplazarse por los laterales los vehículos de vecinos, servicios, transporte público o de emergencia (tramo Bilbao-Independència y tramo Castillejos-Padilla). La superficie de la plaza de las Glorias quedará completamente libre del tráfico privado permitiendo el paso a peatones, bicicletas, autobuses y taxis.
Con la nueva configuración vial los vehículos que circulen por el túnel, al salir, tendrán la opción de subir por la calle Padilla (carril derecho) o bien por la calle Marina (carril central). En línea recta por la Gran Vía, desde el carril izquierda, sólo podrán circular los autobuses.
Las modificaciones provocarán la eliminación del actual giro desde el ámbito central de la Gran Vía en sentido Llobregat hacia la calle de la Independencia. Los vehículos que utilizaban este itinerario para conectar con la calle Aragón tendrán dos opciones: salir por la salida 207 Umbría de Roda/Poblenou, continuar por Bac de Roda y después girar hacia Aragón o Mallorca; o bien seguir en la C-31 hacia el interior del túnel y llegar a Aragón a través de Padilla o Marina.
La calle de la Llacuna quedará sin conexión con la Gran Vía en sentido Llobregat y únicamente restará operativo un carril para acceder al lateral mar, en sentido Besòs (vados y servicios). En el tramo entre la calle de Perú y la Gran Vía, la calle Llacuna se pacificará.
El cambio en la configuración vial mujer respuesta a las demandas expresadas por los vecinos y vecinas en el marco del Compromiso por Glòries.
Un gran impulso al transporte público De la misma manera que el túnel en sentido Besòs, el sentido Llobregat contará también con un nuevo tramo de carril bus que permitirá que los autobuses que vengan del carril bus de la C31 puedan enlazar con el de la Gran Vía, atravesando Glòries y llegando hasta el centro de la ciudad con un carril. Hay que destacar que cada día entran por esta vía más de 250 autocares.
A nivel de tráfico privado, desde el derribo de la anilla vial ya se ha producido una importante disminución de los vehículos que circulaban por este ámbito pasando de los 95.000 diarios (45.000 en sentido Llobregat y 50.000 en sentido Besòs) a los actuales 78.000 vehículos diarios (43.000 en sentido Llobregat y 35.000 en sentido Besòs).