La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que por cada suicidio consumado hay veinte intentos; eso supone que solo en Barcelona se pueden producir unos dos mil intentos de suicidio cada año. El Consistorio, de la mano de la Fundación Ayuda y Esperanza, ha habilitado el teléfono de atención gratuito 900 925 555, que estará operativo las 24 horas del día para atender todas las llamadas en las que se presenten ideas o conductas suicidas.
El servicio lo ofrecen cinco personas voluntarias que se han seleccionado y formado para atender este tipo de llamadas, y las coordina y supervisa un equipo de psicología y un comité de expertos y expertas.
Al mismo tiempo, se ha activado también un punto de atención pensado para atender a familiares, amistades y personas del entorno laboral de las personas con riesgo de suicidio, que está gestionado por la Asociación Catalana para la Prevención del Suicidio (ACPS) y Després del Suïcidi – Associació de Supervivents (DSAS). El servicio está ubicado en el espacio de Barcelona Cuida y el teléfono de atención es el 934 132 121.
Las dos medidas se enmarcan en el plan de choque en salud mental que impulsa el Ayuntamiento para hacer frente a la crisis generada por la COVID-19 y en el Plan de salud mental de Barcelona 2016-2020.
Primeros datos del servicio
En el primer mes de funcionamiento del servicio telefónico de prevención del suicidio, se han recibido 130 llamadas, el 62 % de las cuales han sido realizadas por mujeres. El teléfono ha atendido desde a personas con conductas o intenciones suicidas o con episodios pasados de tentativas, hasta a familiares o amigos de personas con riesgo de suicidio y de personas muertas por suicidio.