El Ayuntamiento de Barcelona ha reforzado la presencia de agentes cívicos en la ciudad para mejorar la convivencia durante el verano. En total, desde hoy y hasta octubre se incorporarán 40 nuevos efectivos, que se sumarán a los 70 que actualmente ya están activos en la ciudad durante la época estival, tal y como ha explicado Albert Batlle, teniente de alcalde de Prevención y Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona.
Este refuerzo, con un presupuesto extraordinario de 391.732 €, responde a la previsión de una mayor afluencia de personas en el espacio público en temporada turística de verano y principios de otoño.
La medida se enmarca en el Pla Endreça y es una de las primeras medidas previstas en el Plan de Gestión de Espacios de Gran Afluencia (EGA), un modelo presentado recientemente por el ayuntamiento con el objetivo de gestionar las zonas más turísticas de la ciudad.
A pie de calle
Todos los agentes de refuerzo actuarán a pie de calle y en las tradicionales zonas de verano como Barceloneta y Gótico, entorno de la Sagrada Familia, plazas de Gràcia, Trinitat Vella, Rambla Prim y Parque de Montjuïc. Este verano, se han añadido tres nuevas ubicaciones donde actuarán los agentes cívicos: la Rambla, el frente litoral y la Villa Olímpica.
Los agentes cívicos, con presencia en todos los distritos de la ciudad, desarrollan tareas de prevención y orientación. Su objetivo es hacer de Barcelona una ciudad más amable y más segura, tanto para los ciudadanos y ciudadanas como para los visitantes. Mediante la app Barcelona a la butxaca informan sobre situaciones problemáticas y agilizan la resolución de incidencias en las calles de la ciudad.
El año pasado, estos agentes realizaron un total de 380.186 actuaciones en toda la ciudad, y su tarea ha obtenido una puntuación de 7’36 sobre 10 de satisfacción por parte de la ciudadanía.