La colocación de estos arrecifes, también denominados biotopos, se añade a los 2.000 bloques de hormigón instalados el verano del 2021 para revestir el dique de abrigo y proteger el Puerto Olímpico de los efectos de los temporales. Más de 300 se naturalizaron para favorecer la diversidad biológica marina.
Los biotopos, de aproximadamente 1 metro de alto y 2 de ancho, se pondrán bajo el agua distribuidos en seis grupos, formando un gran arrecife de bioregeneración de más de 1.300 m2 de superficie. Están formados por elementos prefabricados de hormigón y se fijan al fondo marino mediante un sistema de anclaje. El diseño, lleno de cavidades, favorece la proliferación de especies marinas como gorgonias, meros, congrios, morenas, esponjas, pulpos o langostas.
Esta actuación, que tiene un coste de ejecución de 98.000 euros, se enmarca en el proceso de transformación del Puerto Olímpico, que tiene entre sus objetivos fomentar la biodiversidad marina de la zona, una tarea que se desarrolla junto al Zoo de Barcelona.