Las obras tienen como objetivo solucionar los problemas de escorrentías existentes, debido a que el actual pavimento de sablón se erosiona constantemente por el tráfico de peatones y vehículos ocasionales y la lluvia.
Las tareas consistirán en rebajar el pavimento existente y compactar la subbase, para conseguir una rasante homogénea. Posteriormente, se colocarán dos capas de asfalto, una de regularización y la final de acabado con color similar al del sablón para que quede más integrado.