Así, la Guardia Urbana velará por el mantenimiento de los espacios públicos e intervendrá en el control de las conductas que comporten una degradación, mediante la corrección y denuncia de las infracciones, especialmente las relacionadas con las pintadas y grafitis.
En este sentido, se considerará una degradación del entorno urbano todo tipo de grafiti, pintada, mancha, garabato, escrito, inscripción o grafismo hecho con tinta, pintura o cualquier otra materia orgánica, o bien el hecho de rayar la superficie de los bienes.