El plan de choque para combatir la proliferación de alojamientos turísticos ilegales en la ciudad dispone de un equipo de setenta personas que se encarga identificarlos en las plataformas digitales y de detectarlos a pie de calle. Una vez se detectan, se requiere a las plataformas digitales que los anuncian que los retiren inmediatamente y se abre el expediente, con sanciones de entre 3.000 y 60.000 euros.
Una regulación europea de pisos turísticos ilegales
Los consistorios de Barcelona y de Ámsterdam fueron pioneros en regular los pisos turísticos sin licencia. Ahora, junto con otras ciudades, se solicitará una regulación europea para combatir las viviendas turísticas ilegales y reducir la especulación y la gentrificación.