Este año, engalanarán el espacio público con dos propuestas plásticas: una exposición colectiva del alumnado de bachillerato artístico del Instituto Vall d’Hebron en la fachada del equipamiento, y una instalación escultórica de Land Art, hecha con materiales naturales en colaboración con el Centro de Naturaleza Can Soler y la Fundació Els Tres Turons.
El sábado 28 de mayo, el eje del festival será la cultura urbana. Por la mañana, habrá un skatepark, un torneo de tenis de mesa, el taller de grafito con Malicia y jóvenes del AJSGA y, si tiene buen ritmo, disfrutará con la sesión del grupo joven de taller de producción musical y dj.
Por la tarde, las danzas urbanas se apoderarán de la plaza Meguidó a través de las propuestas de escuelas y bailarinas de Barcelona que fomenten la creación contemporánea del baile y la cultura urbana. Maykel Guijarro del HOP – Plataforma de Danza y Cultura Urbana conducirá la muestra, y, para cerrar el sábado, actuará la cía. Roots con su pieza En proceso.
Al día siguiente, domingo 29 de mayo, arrancarán con Andròmina, un espacio ambulante y poliédrico donde los participantes pueden conocer y experimentar cómo es un proceso creativo a través del apasionante mundo de crear juegos con objetos recuperados. El domingo por la tarde, ocuparán el espacio privilegiado que ofrecen los jardines de Manuel J. Arnalot para llenarlo con el maratón de espectáculos en los que nueve reconocidos grupos y compañías tomarán la calle con sus propuestas coloridas y multidisciplinares.
La apoteósica despedida irá a cargo de los Diables de Montbau que llenarán la plaza Meguidó de luz, fuego, fiesta y tradición.