En Pueblo Seco, un propietario ha facilitado un bloque entero de seis viviendas. En Hostafrancs, se trata solo de un apartamento. A los distritos de Sant Martí, Sants-Montjuïc, Gracia y el Ensanche, se han firmado contratos con cinco propietarios para alojar en total 80 personas, en pisos de una, dos o tres habitaciones. Los propietarios de las viviendas turísticas recibirán del Ayuntamiento entre 700 y 1.200 euros mensuales, según las características de los pisos y el tiempo que los tengan a disposición de los servicios municipales. El alquiler es temporal y se prevé que tenga una duración de entre 12 meses y 3 años.
Las viviendas incorporadas al programa se adjudicarán a familias que actualmente viven en alojamientos temporales, como pensiones, para que puedan mejorar de forma inmediata las condiciones en las que viven. Este programa está diseñado para dar un uso temporal y social a pisos que tienen licencia turística pero que por la crisis generada por la pandemia de la COVID-19 se encuentran vacíos. Actualmente se está trabajando para firmar más contratos con otros operadores de viviendas turísticas que se han mostrado interesados en la iniciativa.