Este concierto, que ya ha agotado a todas las localidades disponibles, supone la culminación de la reanudación de la actividad cultural y de ocio en el conjunto de la Anilla Olímpica, que ya acogió el concierto piloto de Love of Lesbian para 5.000 personas en el Palau Sant Jordi o los conciertos de Sidecar y Carlos Sadness en el Sant Jordi Club. Precisamente el Sant Jordi Club ha acogido entre ayer jueves y hoy viernes cuatro conciertos de Antonio Orozco.
La Anilla Olímpica es un espacio vivo que se ha adaptado de manera ejemplar para mantener la actividad cultural según los requerimientos sanitarios de cada momento. Desde enero de este mismo año, se han celebrado diversos actos culturales y deportivos, como el Dansa Ara o el Campeonato de Atletismo Indoor, que han generado más de 30.000 experiencias seguras en las instalaciones olímpicas.
La Anilla Olímpica ya dispone de experiencia en la organización de eventos culturales y conciertos en época de pandemia. Durante el verano pasado, con la reapertura de los espacios tras la cuarentena, la Anilla se convirtió en uno de los polos culturales de la ciudad, siendo uno de los espacios del festival Cruïlla XXS, que se adaptó a los requerimientos sanitarios del momento.
En este sentido, hay que destacar el esfuerzo de Barcelona de Servicios Municipales (B:SM) para impulsar el ocio y la cultura en un momento como el actual, mostrando su vocación de servicio público y el compromiso con la ciudadanía para generar experiencias positivas y seguras. Todo siguiendo los protocolos sanitarios y de protección para garantizar la máxima seguridad, un trabajo refrendado con la obtención del certificado Global Safe Site en materia de seguridad frente a la COVID-19 y del sello Safe Tourism Certified.