Se quiere garantizar el cumplimiento de la normativa de los vehículos dedicados al transporte de viajeros de hasta nueve plazas (incluido el conductor). El tipo de conductas que se sancionan están relacionadas con el estacionamiento y la circulación de los vehículos de transporte con conductor (VTC), que no pueden estacionar ni circular con la intención de captar clientes que no hayan contratado previamente un servicio, la oferta ilegal de servicios de arrendamiento o el control de las autorizaciones y la documentación necesarias, entre otros.
Los controles y las inspecciones se efectúan prioritariamente en zonas con una alta presencia de estos vehículos: estaciones de tren y de autobús, puntos de interés turístico, zonas comerciales y las vías principales de la ciudad.