Se inician las obras del proyecto de vivienda cooperativa La Domèstika, con una inversión de 2,3 millones de euros
Incluye seis viviendas y espacios de uso comunitario. El Ayuntamiento ha cedido el suelo a la cooperativa en régimen de cesión de uso por un periodo de 99 años.

La cooperativa La Domèstika ha empezado las obras de rehabilitación del edificio ubicado en la plaza de la Farga, en el barrio de Sants, con una inversión total de más de 2,3 de millones de euros y en un espacio cedido por el Ayuntamiento de Barcelona. Se prevé que las viviendas se puedan entregar a finales del año 2026.
Un proyecto de vida compartida
La iniciativa de La Domèstika apuesta por crear una red de afectos y curas más allá de la familia tradicional. Con este objetivo, se pretende construir una estructura que fomente tanto el arraigo en el barrio como las relaciones comunitarias. Así, todas las viviendas serán calificadas de vivienda protegida en cesión de uso y tendrán precios por debajo del mercado.
En la finca, con una superficie de 715 m² construidos, se ubicarán seis viviendas y espacios comunitarios como una sala polivalente, una habitación para invitadas, una lavandería, el patio y la azotea. Además, la rehabilitación de este edificio histórico conservará la gran mayoría de los elementos de la estructura original y se convertirá en un edificio sostenible con placas solares y funcionamiento bioclimático.
Esta iniciativa pionera marca un punto de inflexión para el modelo de vivienda cooperativa en cesión de uso en Barcelona. Como proyecto líder, basado en la sororidad y la construcción de comunidad, se consolida como un referente en la vivienda cooperativa con una visión feminista y de apoyo mutuo.
De casa-fábrica a vivienda cooperativa
El Ayuntamiento adquirió el edificio de la casa-fábrica en 2018 y lo cedió, tres años después, en régimen de cesión de uso y por un periodo de 99 años, a la cooperativa La Domèstika. De este modo, garantizó el mantenimiento del pasado industrial e histórico de Sants, y dar continuidad al proyecto comunitario del huerto urbano.
Así, la rehabilitación incluye dos espacios adicionales para uso vecinal: un local para la Comisión de Fiestas de La Farga y un almacén y lavabos para los usuarios del Hortet de la Farga.
En el acto de inicio de obras, celebrado el pasado 16 de marzo, Joan Ramon Riera, comisionado de Vivienda del Ayuntamiento de Barcelona, señaló la importancia de la vivienda cooperativa, que “tiene un papel en el Pla Viure que ha puesto en marcha el consistorio para hacer efectivo el derecho a la vivienda”, añadiendo que “si queremos llegar a disponer de la vivienda como la quinta pata del estado del bienestar, hay que apostar por todos los modelos e iniciativas posibles para ampliar el parque público”.
Una iniciativa colaborativa
Enraizada en el barrio de Sants, esta experiencia demuestra que es viable impulsar modelos de vivienda accesibles, sostenibles y solidarios, fomentando nuevas formas de convivencia y colectividad.
Las obras cuentan con la colaboración de varias entidades de referencia en el ámbito de la vivienda cooperativa, entre ellas La Dinamo, con dieciséis proyectos en toda Cataluña, de los cuales siete están en Barcelona, y la entidad que ha hecho el acompañamiento integral de la cooperativa. Además, Lacol Cooperativa d’Arquitectes se encarga del área de arquitectura y de obra, La Ciutat Invisible asesora en los aspectos económicos y jurídicos, y Matriz acompaña en el proceso de convivencia.
El convenio ESAL: más de 680 viviendas
El Ayuntamiento, mediante el Pla Viure, reafirma su compromiso de garantizar el acceso a una vivienda digna y asequible, a la vez que trabaja para ampliar el parque público de vivienda con la colaboración de varios agentes. En esta línea, en 2020 se firmó el convenio ESAL con entidades sin ánimo de lucro para reforzar la promoción delegada dentro del sector de la vivienda social. Desde entonces, se han desplegado cuatro fases, la última de las cuales tuvo lugar en enero de 2025 con la cesión de cuatro solares.
En total, se han adjudicado 20 solares municipales para construir 681 viviendas, de los cuales 430 serán de alquiler y 251 en cesión de uso. Esto representa un 70% del objetivo fijado en el convenio, que prevé la construcción de 1.000 viviendas en 10 años, con una distribución del 60% en régimen de alquiler y el 40% en covivienda. En este marco, el Ayuntamiento se ha comprometido a ceder más suelo municipal a las entidades para edificar unas 300 viviendas adicionales entre 2025 y 2026.
Con el inicio de las obras de La Domèstika, Barcelona cuenta actualmente con 10 proyectos en marcha dentro de la primera fase de ESAL, que suman un total de 334 viviendas. Y se prevé que durante este año 2025 empiecen las obras de dos promociones adicionales que aportarán 70 viviendas más.
En el convenio ESAL participan algunas de las entidades destacadas del sector con experiencia en la gestión de vivienda social, como la Associació de Gestors de Polítiques Socials d’Habitatge (GHS), la Xarxa d’Economia Social i Solidària (XES), la Federació de Cooperatives d’Habitatge de Catalunya (Habicoop) y la Coordinadora de Fundacions d’Habitatge Social (Cohabitac).