Al acto de descubrimiento van assitir Belisa Bartra, limpia de la homenajeada; Jordi Rabassa, Concejal del Distrito de Ciutat Vella y Memoria Democrática; Jordi Martí, concejal de Cultura, Educación, Ciencia y Comunidad, y Jordi Ballart, alcalde de Terrassa. La instalación de la placa forma parte del despliegue del Mapa Literario de Barcelona, en el cual se localizan calles y rincones que han estado habitado, frecuentados o inmortalizados por escritores o escritoras de la ciudad.
Anna Murià i Romaní inició su actividad literaria colaborando en publicaciones como La Dona Catalana, La Rambla, La Nau, Meridiano y Diario de Cataluña. En 1933 publicó la novela Joana Mas, y en 1938, La pecera. Entre la una y la otra, escribió los ensayos La revolución moral, El 6 de octubre y El 19 de julio. Acabada la Guerra Civil emprendió el exilio, primero en París y más adelante en la República Dominicana, Cuba y México. En la capital francesa coincidió con el poeta y prosista Agustí Bartra, con quien empezó una vida en pareja y tuvo dos hijos.
En México, donde residió treinta años, trabajó como traductora del inglés y el francés al castellano y colaboró en revistas del exilio catalán. En este periodo también publicó la narración lírica Vía del este, el cuento infantil El niño blanco y el niño negro, y los ensayos Crónica de la vida de Agustí Bartra y La obra de Bartra. Con el relato juvenil El maravilloso viaje de Nico Huehuetl a través de México (1974) ganó el Premio Josep Maria Folch i Torres. Cuando Murià y Bartra volvieron a Cataluña (1970) establecieron su residencia en Terrassa. Algunos de los libros que publicó en las décadas de los setenta y ochenta fueron El país de las fuentes, Nada es verdad, Alícia y Éste será el principio. También un libro de correspondencia con Mercè Rodoreda titulado Cartas a Anna Murià. En 1990 recibió la Cruz de Sant Jordi. Murió en Terrassa el 27 de septiembre de 2002.