Los mercados de la Abaceria y Boqueria, distinguidos con el Premio Nacional a los Establecimientos Comerciales Centenarios

18/11/2021 - 11:46 h

El Mercado de La Boqueria ha sido distinguido con el Premio Nacional a los Establecimientos Comerciales Centenarios de la Generalitat por sus más de ciento cincuenta años de historia, mientras que el Mercado de la Abacería Central ha visto reconocida la labor que lleva a cabo desde el 1892.

Estos mercados son dos de los 33 comercios y mercados municipales galardonados este año por la Generalitat de Catalunya. En total se han premiado 24 comercios y mercados municipales catalanes en activo con cien o más años de antigüedad, y otros 9 establecimientos comerciales y mercados, con ciento cincuenta o más años de historia.

El objetivo de estos premios, que convoca anualmente el Departamento de Empresa y Trabajo, es distinguir los establecimientos comerciales en activo que a lo largo de cien o más años han ofrecido un servicio de calidad y personalizado a los clientes, adaptándose a los cambios en las necesidades que se han producido a lo largo de sus décadas de existencia. Este año también se han otorgado las distinciones correspondientes a 2019, que se aplazaron a causa de la pandemia.

El acto de entrega ha tenido lugar en el Palau de la Generalitat, y ha sido presidido por el president de la Generalitat, Pere Aragonès i Garcia, acompañado del conseller d’Empresa i Treball, Roger Torrent i Ramió, y del conseller d’Economia i Hisenda, Jaume Giró i Riba. También ha intervenido la directora general del Consorci de Comerç, Artesania i Moda, Agnès Russiñol i Amat y el director general de Comerç, Jordi Torrades y Aladrén.

 

La Boqueria, más de 180 años de historia

El 19 de marzo de 1840 se puso la primera piedra del mercado de la Boqueria, presente en Barcelona desde el siglo XIII. Hace ciento ochenta y un años, pues, que la Boqueria está situada en este punto de la Rambla, en un espacio proyectado por el arquitecto Josep Mas i Vila que pronto tuvo que ampliarse con el solar de un antiguo convento y que vio cómo en 1913 se embellecía con el icónico arco modernista de la entrada y un año más tarde se cubría con un tejado metálico.

Durante la década de 1990 y la primera quincena del siglo XXI fue objeto de grandes actuaciones, como la remodelación del espacio de venta, la construcción de la zona logística y de aparcamiento y de su fachada posterior, incluida en el proyecto de urbanización de la plaza de la Gardunya.

En todo este tiempo y pese a las vicisitudes que han vivido el mercado y la ciudad, la Boqueria nunca ha dejado de ofrecer servicio en Barcelona y sus ciudadanos. Su arquitectura híbrida, la mezcla de actividades minorista y al por mayor durante muchos años, o la vocación de ser pionero y avanzado en la evolución de la gastronomía que inspiró a la nueva cocina catalana en Barcelona le han dado personalidad propia.

El mercado de la Boqueria es el mercado municipal del barrio del Raval y es, además, un referente indiscutible de la gastronomía de la ciudad. Con más de 22.000 productos diferentes a la venta, es un escaparate de esta gran diversidad de alimentos, un recinto único donde los barceloneses siempre han podido encontrar lo que no encontraban en ninguna parte.

 

Mercado de la Abacería Central

A finales del siglo XIX se inició un mercado al aire libre en la plaza de la Revolución, que en aquellos momentos se llamaba plaza de Isabel, junto al actual mercado. Posteriormente, un industrial llamado Puig Martí decidió construir el actual mercado cubierto que se inauguró en 1892 bajo el nombre de Isabel. Posteriormente recibió el nombre de Mercado de la Revolución.

Muchas de las paradas del mercado al aire libre de la plaza de la Revolució se trasladaron al mercado cubierto, propiedad del señor Puig Martí. Pasados ​​algunos años, el mercado pasó a manos municipales a cambio de recalificar como edificables varios terrenos propiedad de Puig Martí. Durante muchos años coexistieron ambos mercados, el mercado cubierto y el mercado al aire libre. Sin embargo, las instituciones obligaron a los vendedores al aire libre a trasladarse al mercado cubierto. Hay que decir que muchos de los actuales comerciantes son limpios o bisnietos de aquellos primeros vendedores de la plaza de la Revolució.

Hasta los años cincuenta el interior del mercado presentaba un aspecto muy distinto al de hoy en día. En lugar de las actuales paradas había unas tablas de madera o de mármol por lo que se tenía una visión general de todo el mercado de un lado a otro. Posteriormente recibió el nombre que mantiene en la actualidad, Abaceria central. El mercado cubierto es de 1892 y fue reconstruido en 1965.

Como el resto de mercados centenarios de la ciudad, tiene una estructura arquitectónica metálica con cierre de obra vista y está formada por tres cuerpos, una nave central y dos pasillos laterales. Aparte de las grandes proporciones, esta nave destaca por sus tejados ovalados.

La Boquería y el mercado de la Abacería Central forman parte de la Red de Mercados Municipales de Barcelona, ​​compuesta por cuarenta y tres mercados, alimenticios y no alimenticios, que dan servicio a todos los barrios de Barcelona.